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MOTO3 | AUSTIN

Acosta: "He volado seis metros de altura y cincuenta de largo"

“Ha faltado poco, ha faltado poco. No sé por qué nos estamos cayendo en la recta. No lo he entendido muy bien”, dice tras su caída múltiple con Alcoba y Migno.

Austin
Pedro Acosta.

Pedro Acosta se encuentra bien, tanto física como anímicamente tras el durísimo accidente que ha sufrido en la segunda carrera de Moto3. Tras pasar por la clínica del circuito de Austin, donde se comprobó que no sufría lesión alguna, atendió con el buen humor que le caracteriza a AS.

-Se nos ha puesto el corazón en un puño con la caída de los tres. ¿Ha sido un milagro que no pasara nada grave?

-Sí. Ha faltado poco, ha faltado poco. No sé por qué nos estamos cayendo en la recta. No lo he entendido muy bien. La de Migno, sí, porque cuando vamos siete u ocho en un grupo es normal que, si se cae alguien, que otro le dé. Yo también he impactado con él, pero menos mal que estoy bien. El primer impacto ha sido con la espalda y por eso me he quedado un poco en el suelo, pero sin consecuencias.

-¿Cuántos metros ha volado?

-No lo sé. Sólo veía tierra, cielo, tierra, cielo hasta que he parado. Bueno, ha sido guapa, ¿eh?

-No diga eso, por Dios, que el susto ha sido enorme.

-Ya, pero bueno.

-¿Ha llegado a rozar o tocar con el muro lateral?

-No lo sé ahora mismo, no sé qué decir.

-¿Se piensa algo cuando va tanto tiempo viendo cielo y tierra?

-No, sólo el cómo moverte. Creo que nos hemos movido bien para tener las menos consecuencias posibles.

-¿El resultado de carrera qué le dice? Al final ha sido octavo, lo que con el segundo de Foggia le deja con 30 puntos de ventaja al frente de la general y con una remota bola de título ya en Misano 2.

-¿30 puntos? Hay que creer. Hemos acabado octavos y podía haber acabado peor, sin puntuar. Me quedo con eso.

-Muchas gracias, Tiburón.

-Muchas gracias.

(A la media hora, AS volvió a hablar con Acosta, que ya había revisado la caída).

-¿Ha visto ya la caída?

-Sí y calculo que abré volado seis metros de alto y 50 metros de distancia. Y sí que he dado con el muro, lo que ha hecho que me pusiera a dar vueltas como una peonza. He notado el golpe en la espalda y he visto que me podía mover, lo que me ha tranquilizado.

-Susto de órdago, pero sólo susto felizmente.

-Sí, pero lo que no puede ser es que nos caigamos en la recta. Llevamos tres pérdidas este año y hay que hacer algo. Eso sí, yo tenía ganas de volver a salir y estaba con el mono puesto en el box para ello.