Suzuki necesita un líder
La salida de Davide Brivio ha dejado a la marca japonesa sin una figura representativa dentro del box: "Nos ha hecho estar más ocupados".
Suzuki está lejos de su mejor versión. Y es que los podios de Silverstone y Aragón pueden quedarse solo en un espejismo. Son los actuales campeones del mundo y, sin embargo, su paso por la primera mitad de la temporada (y lo que llevamos de segunda) ha estado prácticamente en un segundo plano, sin ser lo que se esperaba de ellos. Los resultados no han llegado de manera constante, han tenido variedad de problemas con su moto y, sumado a esto, el famoso holeshot no llegaba desde Japón. Tuvieron que insistir hasta la saciedad Joan Mir y Álex Rins para conseguir ese 'botón mágico' y, aún con esas, no llegó hasta superado el ecuador del curso. Pero no es todo: ahora esperan una actualización que tampoco llega.
Parece que Suzuki necesita un líder. Una figura dentro del box que lleve la voz cantante que, en su día, Davide Brivio abandonó para encarar un nuevo reto en su carrera deportiva. Sin duda, su marcha ha hecho daño a la marca de Hamamatsu, ya no solo en términos tecnológicos o en resultados, si no en el ambiente que se vive dentro del box. Lo que el año pasado se veía como una gran familia feliz se ha apagado un poco con su marcha a la Fórmula 1. Y eso, sumado a la falta de desarrollo de nuevas piezas por parte de la fábrica, ha hecho que Suzuki marche actualmente en la cuarta posición del Mundial de marcas con 136 puntos (por detrás de Honda, Yamaha y KTM).
"No estoy satisfecho con los resultados", confesaba Shinichi Sahara, team director del Suzuki ECSTAR, quien ha sumado a su trabajo todo lo que Brivio dejó en su camino hacia Alpine en la F1. Sin embargo, el trabajo se desborda y se ve reflejado en pista. Y es que, en doce carreras, Suzuki ha sumado la friolera de seis podios (cinco de Mir y uno de Rins) que se ha metido en la remontada hacia el título que, por ahora, caería en manos de Fabio Quartararo (está a 65 puntos de distancia).
La tarea es difícil, pero confían en que la regularidad del año pasado haga su gran aparición y puedan luchar por ese título que parece inalcanzable (Yamaha les aventaja con 84 puntos). Un paso adelante se ha dado, en gran medida, por la llegada del holeshot con el que tanto tardaron y que ha gustado mucho a ambos pilotos. "El mundial está complicado, pero no está acabado", avisaba Mir este pasado domingo tras la carrera en Silverstone.
Se avecinan cambios
Pero las prioridades están claras para Suzuki: es hora de buscar un nuevo director de orquesta. Y Sahara ya ha empezado a buscar candidatos en el paddock de MotoGP (eso sí, nada confirmado por el momento). "La marcha de Brivio nos ha hecho estar más ocupados, porque todo el mundo en el equipo nos tenemos que compensar los unos a los otros. Yo ahora tengo más trabajo que antes, porque tengo que cubrir parte de su trabajo", confiesa el team director del fabricante japonés, en una entrevista con MotoGP.
Sin embargo, el movimiento llega ya tarde para este 2021, por lo que el objetivo está centrado ya para 2022. Sahara admite que mantendrá su rol dentro del equipo campeón del mundo "para lo que resta de temporada" aunque, la verdad, es que Suzuki ya piensa en "modificar la estructura del equipo el próximo año". Y, tras evitar en muchas ocasiones la necesidad de una persona, al final, han acabado sucumbiendo a lo evidente: "Creo que necesitamos tener a alguien como 'team manager', estamos mirando quién puede ser la persona correcta". Una decisión que, incluso Joan Mir, ve con buenos ojos: "A mí me gustaría. Los japoneses ven que hace falta una figura de team manager. Esto está clarísimo y yo también lo considero".
Rins echa de menos un director
Sorprendido se quedó Álex Rins cuando, en la rueda de prensa previa al inicio del Gran Premio de Gran Bretaña, se enteraba de que Suzuki ya buscaba una persona para ocupar el cargo de Brivio. "No sabía nada sobre esto, después preguntaré a Sahara", comentaba el español, que, pese a no saber nada de la búsqueda de un nuevo director, sí admitía la necesidad de tenerlo. O, al menos, la sensación de que falta una persona que lleve el peso del equipo, echar de menos una persona que ocupara ese vacío que Brivio dejó con su salida.
Un sentimiento que habían negado en la primera parte de la temporada, pero que, con la falta de una victoria en la primera mitad de año, un rendimiento muy por debajo de lo que esperaban y la visita de Brivio en el Red Bull Ring; acabó aflorando: "Cuando vi a Davide en Austria tuve la sensación de que sí, que echamos de menos a un director". Es por todo eso que Suzuki necesita un líder, una voz cantante, y un director de orquesta que ya buscan. Aunque, lo cierto, es que será difícil de superar lo que Brivio consiguió para la escudería campeona del mundo.