Torres: "Habrá espectáculo electrificante con las MotoE"

-¿Cómo se siente ante la defensa del título de campeón de MotoE?

-Podría decir que con más presión, porque voy a ser el objetivo de todos, pero no me siento. En cierta parte es como que ya lo he hecho y que puedo volver a hacerlo o que no pasa nada si lo hace otro... (Risas). No hombre, no. Está claro que este año va a ser más difícil que el pasado porque se está rodando más rápido.

-Cuente las novedades de este año.

-Tenemos un neumático trasero que tiene mucha más adherencia y agarre, lo que significa que requiere otro estilo de conducir. Es una moto que corre poco, entre comillas, porque corre como las Moto3, 260 de velocidad punta, pero que luego en curvas más cerradas sigue teniendo la misma chicha, porque el bicharraco empuja. Se acusa más ese doble estilo de conducción, de curvas lentas más como una mil y de curvas rápidas más como una Moto3. Curvas donde antes reducías a cero este año no lo haces porque hay más adherencia. Los neumáticos son mejores en todos los sentidos.

-¿El delantero también?

-Sí, lo que pasa es que no pudimos hacer prueba y contra prueba porque pusimos el nuevo desde el principio y nadie ha tenido queja.

-¿La moto continúa pesando lo mismo?

-Sí, 263 kilitos.Llevamos llantas reforzadas y el neumático tiene una carcasa especial cuando se va al suelo.

-¿Y las baterías?

-Las mismas. Lo único nuevo es que este año en la parrilla vamos con el carro y nos recargan un siete por ciento la batería, lo que permite dar una vueltecita más, así que este año las carreras son a ocho vueltas y dan un poquito más de juego.

-Son motos seguras, ¿verdad?

-Sí. Yo me siento muy seguro al conducirla. Es verdad que escuchas de todo, como que puede arder a la que se calienta un poco, que el fuego químico no se apaga nunca... Cosas muy fuertes, pero nunca ha pasado nada grave en verdad. No me da nada de miedo. Luego te montas y va como una moto normal. Es una categoría mega divertida en todos los aspectos, donde todo el mundo va a cañón y puede pasar de todo. El formato es bueno y hay que tener todo muy claro.

-Perdón por la pregunta, ¿se ha ido al suelo con ella alguna vez?

-(Se pone a tocar madera). No, de momento. Y es un logro. El año pasado no gastamos nada en material. Llevaba la moto de Sete y acabé con la moto de Sete. Sólo una maneta y porque se le cayó a un mecánico en parado. El tema es que cuando en parado se vuelcan dos grados, como no tengas una pierna como la de Usain Bolt no la pones en vertical otra vez.

-¿Por qué se pone tapones?

-Para no escuchar cosas raras, porque los pilotos de la vieja escuela, como yo, somos muy de coger el embrague enseguida si escuchamos algo raro, pero aquí no hay embrague. Se escuchan cosas cuando pasas por encima de una piano, cuando derrapas acelerando o frenando, el repicar de la cadena o el aire, que se escucha muchísimo. Para minimizar todo eso, para estar más concentrado y, sobre todo, para parecer más profesional, que eso es lo primero de todo (se ríe), pues taponcitos.

-¿Quiénes son los pilotos a batir además del campeón?

-Yo no lo soy. Creo que los pilotos a batir son Granado y Aegerter. Yo no fui el más rápido el año pasado, fui el más regular.

-¿Como Mir en MotoGP?

-Sí, lo que pasa es que él va más rápido que yo.

-¿Cómo está viendo el Mundial?

-Estoy impresionado con lo de Pedro Acosta, porque es de otra galaxia, y creo que las estrellas de aquí también están flipando con él. Y Márquez tiene un talento increíble y le sigo viendo con posibilidades de título este año. Para mí es el favorito a pesar de la desventaja que ahora tiene, porque es Marc.

-¿Algo que decir en clave Muchachada Nui para despedir la entrevista?

-Intentaremos este fin de semana ir a 'muelte'. Daremos un espectáculo muy electrificante y, sobre todo, daremos wats (vatios) a tope.