El órdago de Vettel y Red Bull
El alemán tiene acuerdo con Racing Point, aunque su fichaje no se confirma. Tiene motivos para esperar que se concrete el futuro de Albon junto a Verstappen.
"No hay novedades, copiad y pegad la respuesta de las otras carreras". Sebastian Vettel zanjó así la clásica pregunta sobre su futuro, presente en todos los grandes premios. En Spa solían resolverse o anunciarse muchas incógnitas más importantes de la parrilla, cuando era la primera carrera posterior al verano, pero en esta temporada sin descanso el alemán sigue jugando sus cartas. Su acuerdo con Racing Point en sustitución de Checo Pérez se da por hecho y la relación con Lawrence Stroll y Otmar Szafnauer es óptima, pero el mexicano se siente seguro en su plaza y la incorporación de Seb al proyecto Aston Martin no termina de concretarse, por alguna razón.
No es un secreto que el de Heppenheim, de 32 años, quiere un coche ganador o nada. El RP20, copia de Mercedes, es un gran monoplaza de zona media pero conviene recordar que, pese a las quejas de rivales o sanciones de la FIA, todavía no ha subido al podio en 2020 cuando Ferrari o McLaren sí lo han conseguido. Es Racing Point quien tiene que convencer a Seb, no al revés, de hecho esta opción también estuvo disponible para Fernando Alonso y el asturiano se decantó pronto por Renault pensando en 2021 y, sobre todo, en 2022. Porque el fabricante independiente de Silverstone tendrá más problemas para replicar un coche campeón ahora, bajo la presión de la FIA, y ante un cambio reglamentario profundo que obliga a pintar sobre un lienzo en blanco.
Por las cercanías del paddock, hay fuentes que ven lógico que Vettel espere a Red Bull, por mucho que Helmut Marko desmienta sus posibilidades. Es cierto que la casa de Milton Keynes no ficha campeones, sino proyectos, pero también es verdad que el alemán es fruto del programa de pilotos austriaco y, hasta ahora, el que más rédito les ha dado con cuatro títulos. Alex Albon aún tiene mucho que demostrar, sobre todo a una vuelta, cumple los domingos pero no está a la altura de Verstappen (40 puntos por 94) y es imposible luchar por podios constantemente, o por el Mundial de constructores, cuando uno de los pilotos se pierde en la zona media.
Marko no confió en Kvyat (que hizo un podio en 2019 y en su día ganó a Ricciardo) cuando decidió bajar a Gasly, precisamente a partir de Spa. Mientras el francés cumple, en el paddock impera la sensación de que tiene más proyección que Albon, pero parece difícil que el sargento austriaco corrija sus propias decisiones. Si en algún momento quisiera reforzar la pata coja del garaje no le quedaría más remedio que mirar fuera de Red Bull. Entonces, Vettel o Hulkenberg se convertirían en las opciones más apetecibles del mercado. Y Seb, a pesar de su mala temporada con el Ferrari SF1000, tiene muy buen cartel en la Fórmula 1. Christian Horner, jefe de su antiguo equipo: "Está pasando por un mal momento con el material que tiene ahora. Pero no se le puede desposeer de todo lo que ha logrado en su carrera, es el tercer piloto más exitoso de la historia".