Jesús Calleja vivió un infierno en el Dakar, ¿por coronavirus?
El aventurero cuenta que pasó una odisea para acabar debido a que se contagió con una gripe con síntomas similares a los del COVID-19.
Se le vio mal desde antes incluso de comenzar la competición. En las verificaciones técnicas del Dakar en Yeda, los médicos hablaban con Jesús Calleja, e incluso le daban algún medicamento, aquejado de un virus que le tenía preocupado. Ahora, más de dos meses después y viendo lo que está pasando en el mundo, el aventurero cree que aquello que sufrió en Arabia Saudí pudo ser coronavirus. Porque no solo lo sufrió él, también mucha gente de la caravana del rally en el desierto.
"Cuando empecé a sentirme mal, me dijeron que parecían los síntomas de la Gripe A y más de la mitad del vivac pillamos la misma mierda. Un médico de la organización me dijo que más de la mitad del campamento estaba contaminado, incluso había alguno grave. En el Dakar hubo movida, no sé cuál, si Gripe A u otra cosa, pero hubo movida", recuerda en 'El Confidencial', donde asegura que "el momento álgido fue la etapa de descanso": "Ese día no tenía fuerzas ni siquiera para vestirme".
"No comí en todo el día, estaba a base de té, estaba tan hecho mierda... Fue un día terrible, fue chungo de verdad. No era una gripe, aquello era chungo de cojones. Duró diez u once días, es muy raro que de repente hubiera una gripe que contagiara a todos a velocidad récord y con los mismos síntomas que los del coronavirus", dice. De hecho, no es el único que lo piensa: "El padre de Cristina (Gutiérrez) me llamó y me dijo: 'Jesús, estoy convencido de que hemos tenido el coronavirus'. Y atando cabos de todo lo que pasamos, no tengo ninguna duda".
"Sabremos si lo hemos pasado cuando haya resultados de los análisis serológicos que te dicen si has tenido ese virus en algún momento", añade, y finaliza contando lo que tuvo que pasar para poder acabar el rally: "Peleaba contra una gripe muy cabrona, me levantaba con una fiebre tremenda. Es muy difícil contar las condiciones en las que tenía que correr, se me iba la pinza. Tenía fiebre y la cabeza me estallaba debajo del casco, no sé cómo pude acabar, me mareaba". El esfuerzo mereció la pena y pudo completar el Dakar al cuarto intento.