El automovilismo es cosa de familia
Los hijos de los pilotos de la Fórmula 1 de los años 80 y 90 buscan un hueco propio en la disciplina que hizo célebres a sus progenitores.
Nico Rosberg hizo historia en 2016. Al proclamarse campeón del mundo de Fórmula 1, se unió a un selecto club del que tan solo formaban parte Graham y Damon Hill, el de los padres e hijos que han formado parte del Gran Circo y han ganado la clasificación de pilotos. Desde los primeros años de la Fórmula 1, ha sido muy habitual que hijos, sobrinos o nietos de grandes figuras del automovilismo hayan cogido el testigo de estos y se hayan lanzado a correr en esta disciplina. En la próxima generación de pilotos que ambicionan un asiento en alguna de las escuderías, hay algunos apellidos conocidos que traerán sin duda buenos recuerdos a los aficionados de la Fórmula 1.
El más prometedor de entre todos ellos es sin duda Mick Schumacher. El hijo del Kaiser, el piloto más laureado de la historia de la Fórmula 1 con siete títulos, tiene apenas 20 años, pero ya suena con fuerza para engrosar las filas de Ferrari en las que su progenitor triunfó. De hecho, forma parte desde el año pasado de la Ferrari Driver Academy, la escuela de pilotos de la escudería italiana. El joven Mick ha corrido también en la Fórmula 2 y en la Fórmula 3, y recientemente, el director del Cavallino Rampante, Mattia Binoto, abrió la puerta a que el joven pueda incorporarse al primer equipo próximamente. Curiosamente, y al igual que hace unos años, no es el único Schumacher en la rampa de lanzamiento, ya que su primo David, hijo de Ralf, el hermano de Michael, ya ha debutado en la Fórmula 3 con los colores de Campos Racing. ¿Volveremos a ver dos Schumacher en la línea de salida de un Gran Premio?
Al igual que Mick Schumacher, otro joven, Giuliano Alesi, hijo de Jean Alesi, que corrió en la F1 entre 1989 y 2001, debutó la pasada temporada en la segunda categoría del automovilismo. Fue el protagonista involuntario del triste accidente en el que murió el piloto Anthoine Hubert a finales de agosto en el circuito de Spa en Bélgica. El joven Alesi es también miembro del programa de jóvenes de Ferrari. Junto a él en la Fórmula 2 ha corrido otro cachorro del automovilismo, el suizo Louis Delétraz, de 22 años, e hijo de Jean-Denis Delétraz, breve piloto de la Fórmula 1. Delétraz ha triunfado en muchas categorías inferiores, y llegó en 2017 a la F2. Allí, ha ido mejorando progresivamente hasta alcanzar una octava posición en el pasado campeonato de pilotos que hacen soñar con un mejor resultado en los próximos años.
Los Fittipaldi se saltan una generación
En algunos casos, los nuevos pilotos llegan de dos en dos. Es el caso de los hermanos Pietro y Enzo Fittipaldi, nietos de Emerson Fittipaldi, campeón de la Fórmula 1 en 1972 y 1974. El mayor, Pietro, de 23 años, empezó en la NASCAR, y ha corrido hasta ahora en la Fórmula 3, el IndyCar, el WEC y el DTM, y también es piloto probador de Haas. Su hermano pequeño, Enzo, fue recientemente subcampeón de la primera edición del Formula Regional European Championship, y el año anterior, con un coche de Prema Theodore Racing, ganó el Campeonato de Italia de Fórmula 4. Ambos ambicionan seguir el legado del abuelo Enzo.
También brasileño y campeón del mundo es Nelson Piquet, que tiene dos hijos que se han dedicado al automovilismo. Mientras que el mayor, Nelson, tuvo una carrera para olvidar en la Fórmula 1, el pequeño, Pedro, de 21 años, quiere llegar más lejos. Hasta ahora, ha tenido éxito en la Fórmula 3 Brasil, que ganó en 2014 y 2015, y ha debutado también en la Fórmula 3 con la escudería Trident, la misma con la que disputó la GP3 Series. Otro hijo de, Harrison Newey, vástago del jefe de ingenieros de Red Bull Adrian Newey, corrió durante una temporada en esta tercera categoría del automovilismo, pero posteriormente prefirió probar en diversas pruebas de resistencia como las 24 Horas de Le Mans y la categoría LMP2 de las Le Mans European Series. Actualmente corre en Super Fórmula.
Finalmente, el caso más peculiar es el de Aurélien Panis. El hijo del piloto francés Olivier Panis lleva desde 2011 en el mundo del automovilismo, y sus mayores éxitos se han producido en el trofeo Andros de conducción sobre hielo, en el que se proclamó campeón en 2018, fue subcampeón en 2016 y 2017 y tercero en 2019. Panis, de 25 años, ha corrido también en la World Series Fórmula V8 3.5, en la que fue quinto en 2016, y en la Copa Mundial de Turismos, así como en la European Le Mans Series.