"No estoy en la F1 para hacer un podio e irme, quiero victorias"

Se le escapa la sonrisa a Carlos Sainz, que parece más ligero en Abu Dhabi, como si hubiera abandonado una mochila cargada de piedras hace dos semanas. 2019 ya era el año de su vida en la Fórmula 1, con McLaren, con el aplauso de la crítica y afianzándose como un piloto capaz de luchar por mucho más que puntos en el 'Gran Circo'. El madrileño de 25 años, que este fin de semana luchará por el sexto del Mundial (está séptimo, igualado a puntos con Gasly), charla con la prensa española desplazada a Yas Marina.

-¿Qué tal la digestión?

-Muy contento, un podio siempre sienta bien y más acordándome de lo cabreado que estaba el sábado, saliendo último el domingo y remontar así te deja muy buen sabor de boca. Pero rápido nos pusimos a trabajar en la última carrera de Abu Dhabi porque, quieras o no, también nos jugamos bastante.

-¿Y la celebración?

-Aparte de rapar a Rupert (su entrenador), celebrarlo en casa con familia y amigos y abrir una botella de champán con la familia, nada más.

-Si le cuentan hace un año cómo sería la temporada 2019, ¿se lo hubiera creído?

-Yo siempre pensé que el podio llegaría, aunque no esperaba que fuese en 2019 por la situación en la que estaba McLaren y lo difícil que está hoy un podio en la F1. Pero tarde o temprano tenía que llegar. Aspiro a quedar sexto, es el objetivo y no va a ser fácil, pero el simple hecho de luchar por esa posición en la última carrera ya habla bien de la temporada que hemos hecho. El domingo hay que salir a disfrutarlo y conseguir un objetivo que a principio de año era imposible.

-¿Cambia en algo su percepción de la temporada de acabar sexto, séptimo u octavo?

-No, porque simplemente luchar por el sexto ya era impensable hace unos meses y me hace estar contento y orgulloso. La felicidad depende de que estemos ahí, luchando, no de cómo acabemos. Hay dos pilotos que han hecho diez carreras cada uno en un coche cuyo peor resultado es un cuarto o quinto. Cuando yo lo mejor que podía sacar en condiciones normales era un séptimo.

-Se perdieron muchos puntos con Renault o la fiabilidad que ahora vendrían muy bien…

-Este año hemos tenido muchos problemas los sábados con banderas amarillas o fiabilidad que nos han obligado a esmerarnos los domingos. Como en Brasil, que clasifiqué último, si me llegas a decir ese sábado que el domingo iba a ser la carrera en la que los líderes iban a fallar, y yo saliendo último, me voy a la cama queriendo matar a alguien porque me están privando de la oportunidad de luchar por un podio. Con la salida y las primeras vueltas nos metimos en esa lucha, pero quizás el mal sabor de boca se me queda más el sábado que el domingo.

-Igual quería que esta temporada no se acabase nunca, porque parece que le sale todo…

-Sí, pero el objetivo es empezar 2020 como ha ido 2019, eso no cambia nada.

-¿Qué plan tiene ahora?

-Después de Abu Dhabi volveré a Woking porque tenemos varios eventos de final de año y cenas de Navidad, los premios Autosport y algunas cosas más. Revisaremos la temporada y luego ya en enero empezaremos con las reuniones para preparar 2020.

-Después del podio, ¿la victoria?

-Las victorias son mi objetivo, no estoy en Fórmula 1 para hacer un podio e irme, quiero luchar por más cosas con McLaren el año que viene, por algún podio más aunque no se pueda ganar aún. Lo único que ha hecho este podio es darme más ganas y hambre para seguir hacia adelante. ¿Ganar en 2020? No es realista salvo que pase una locura.

-¿Ayudó montar el motor nuevo para esas últimas vueltas de Interlagos con un plus? ¿Y le ayudará aquí?

-Seguro que al menos no perjudicó, a ver si me lo vuelve a dar este fin de semana porque no está muy claro.

-¿Por qué no está claro?

-No digo nada… y lo digo todo.