Brasil olvida la F1 con cuatro pilotos en la Fórmula E
Nasr se ha unido a Di Grassi, Massa y Piquet lo que ha hecho crecer el interés. El siguiente paso será, casi con seguridad, un ePrix la próxima temporada.
"Que yo sea ya el cuarto brasileño en el campeonato es algo muy positivo para Brasil. Tenemos pilotos muy competentes y con grandes cualidades para disputar categorías top en el mundo y ser el cuarto demuestra esa potencia a la que me refiero", asegura Felipe Nasr a As. El expiloto de F1 con Sauber es la última incorporación del certamen eléctrico de la FIA y llegaba a su debut en México con GEOX Dragon, en sustitución del alemán Gunther, con ilusión.
Brasil goza de una excelente salud en la Fórmula E... todo lo contrario que en la F1 donde por segunda temporada consecutiva no habrá pilotos brasileños en la parrilla oficial. "En Brasil tenemos una historia muy importante con La F1 y la verdad es que es un poco triste que ahora no tengamos ningún representante", afirma Nasr. Una situación que sucedió por primera vez en 2018 después de tener siempre alguno desde 1969.
La pena de que no haya pilotos del tercer país en títulos, tras Gran Bretaña y Alemania, y cuyos representantes han logrado 101 victorias, 126 poles, 293 podios permite a la Fórmula E gozar de una parrilla espectacular como afirma Álvaro Buenaventura, director comercial de la Fórmula E en América Latina: “Se ha incorporado Massa, están Di Grassi y Nelsinho Piquet, y ahora llega Felipe Nasr, un póquer de ases brasileños. Además está el argentino 'Pechito' López. Estos pilotos latinos cuando compiten en su continente llegan al corazón de los aficionados y se crecen”.
La falta de planificación en la base y las escasas, por no decir nulas, ayudas de gobierno, empresas privadas o patrocinadores han alejado a los brasileños de la F1, pero la irrupción de la Fórmula E ha abierto un camino a pilotos importantes que están reconduciendo sus carreras y aumentando de nuevo el interés por el automovilismo en Brasil. La más que posible llegada de un ePrix la próxima temporada sería el espaldarazo definitivo para el asentamiento del certamen eléctrico de la FIA en Brasil y un nuevo éxito de la Fórmula E en un país con gran tradición automovilística que cada vez vira más hacia el mundo eléctrico.