Marcha atrás de Mercedes con sus llantas revolucionarias
Los alemanes sellaron con silicona los bujes de las llantas con forma cóncava en Austin por miedo a una posible protesta de Ferrari.
30 millones de euros. Esta es la cantidad de dinero que Mercedes se ha gastado para diseñar una nueva suspensión trasera y toma de frenos con forma cóncava para generar una cámara de aire dentro de la pared de la llanta y expulsar la mayor cantidad de calor del neumático.
Unas mejoras desarrolladas en el condado de Northamptonshire bajo la dirección de James Allison y Aldo Costa que fueron sometidas a consulta por parte de Ferrari al entender los italianos que estos elementos influían en el rendimiento aerodinámico del monoplaza, aspecto que está prohibido por reglamento. "Cualquier parte del monoplaza que influya en el rendimiento aerodinámico debe estar fijada completamente a la parte por la que se una al coche y permanecer inmóvil".
Cabe recordar que aunque la FIA sigue defendiendo que las llantas de las flechas plateadas son legales, su valoración es sólo consultiva, teniendo la decisión final los comisarios de cada carrera sobre la legalidad o ilegalidad de un diseño.