Lorenzo también causa baja en Japón por la muñeca izquierda
Se ha parado nada más salir a la pista por el dolor de la fractura aún no curada de Tailandia, donde se cayó por una avería de la Ducati, y no sabe cuándo volerá.
Cualquier lesión es inoportuna para un piloto de MotoGP, pero si hay un momento horrible para hacerse daño es cuando llega el triplete transoceánico, y eso es lo que le ha pasado a Jorge Lorenzo. El de Ducati ya advertía ayer que sus sensaciones con el brazo izquierdo no eran buenas antes de subirse a la moto y nada más hacerlo ha comprobado que el dolor le impedirá tomar parte en el GP de Japón.
Ni una vuelta completa ha dado el mallorquín. Salida a pista y vuelta a boxes, negando con la cabeza, para confirmar a los miembros de su equipo que sus peores pesadillas se han hecho realidad, y como ya sucediera en Tailandia, también será baja para la carrera de Japón por el dolor que siente en la muñeca izquierda, fruto de la fractura en el radio aún no curada por la aparatosa caída de Buriram, tras averiarse su Ducati. Y lo peor puede que no sea eso, porque el último escáner que le han realizado, ya en Motegi, dice que la fractura ahora es más completa y no sabe cuándo podrá regresar. De ese modo, es duda también para la cita Australia, dentro de dos domingos.
El pentacampeón medita en estos momentos junto a la gente de su equipo qué hacer y entre sus dudas, seguramente, también estará conseguir llegar de la mejor forma posible a su estreno con la Honda en el test de Valencia, el 20 de noviembre. Si como dijo ayer esa lesión necesita de 40 días de reposo, hasta ese objetivo se complica, y se antoja muy importante para empezar con buen pie su andadura en el ala dorada. Además, también querría despedirse de Ducati de la mejor manera posible, ganando carreras, tal como hizo en su adiós con Yamaha en Valencia 2016. Para su tranquilidad quedan las tres victorias conseguidas este año, en Mugello, Montmeló y el Red Bull Ring, pero quería y podía conseguir más, algo que ahora es inviable con esa muñeca tocada y sólo protegida de una férula que no le ha servido para llegar a tiempo a Japón.