Mir: "A ver quién es el guapo que rechaza un contrato de Suzuki"
"Que digan lo que quieran. Yo tenía claro que, si venía una fábrica, subiría, y cuando vi el interés de Suzuki se me encendió la bombilla", dice.
Como uno más de MotoGP. Así ha comparecido Joan Mir a la rueda de prensa oficial con la que ha arrancado el GP de Cataluña, para hablar públicamente de su fichaje por Suzuki para las dos próximas temporadas, como compañero de Álex Rins y tras un único año en Moto2, el de este curso, el mismo en el que no descarta aún luchar por el título pese a los 47 puntos que le saca Bagnaia.
-Felicidades por su fichaje.
-Gracias, gracias. Es un sueño y me acabo de enterar ahora... (Risas).
-¿Qué le ha hecho elegir Suzuki para dar el salto a MotoGP?
-Básicamente, lo que me ha dicho mi corazón ya que había más opciones, pero en Suzuki me he sentido más apoyado, han apostado más por mí y me he sentido más querido por el trato que me han dado. Por eso mi corazón ha decidido que me fuese para Suzuki y creo que estoy convencido de que no estoy equivocado. Todos saben cómo es la fábrica y creo que están haciendo unos resultados muy buenos y que el proyecto que hay es muy bonito. Me gustaría continuar con ellos en el futuro.
-¿Han sido sensaciones?
-Todas esas cosas son externas, todo esto influye en las sensaciones que puedas tener tú. La decisión la he tomado yo y sólo yo. Sí que es verdad que en algunos puntos de vista me han podido dar una ayudita de hacia dónde decantarme, pero tenía claro que quería a Suzuki.
-¿Ha influido tener como compañero de equipo a Rins en lugar de Márquez?
-No, no. Porque ser compañero de equipo de Marc Márquez también sería la bomba. Lo que podría aprender al lado de este señor sería la bomba, pero no van por ahí los tiros, más que nada es que han apostado más fuerte y yo he decidido irme para allí.
-Brivio ha dicho que ve en usted a un nuevo Schwantz...
-Me gustaría. Normalmente soy de los que cuando empiezo con algo no suelo cambiar mucho, desde que empecé, con los patrocinadores y con todo no suelo cambiar, salvo que no quede más remedio y me gusta estar con quien apuesta por mí. En este caso Suzuki ha apostado por mí y espero que en el futuro pueda ser competitivo, crecer con ellos y devolverles todo lo que han apostado ellos.
-¿Siente ahora más presión para lo que queda de temporada y da tiempo a intentar ser campeón?
-Da tiempo. Es diferente, hay presión, antes había presión para hacerlo bien y ahora hay presión porque te han fichado para MotoGP y hay que espabilar. Te quitan presión por un lado pero te la dan por otra, con lo cual estoy en las mismas.
-¿Y parte de esa presión era por tener que quedarse tres años en Moto2 en el caso de no firmar ahora?
-Esto es un motivo, una razón a tener en cuenta, pero si miras para atrás un ejemplo parecido al mío podría ser el Maverick, que ganó el Mundial de Moto3, llegó a Moto2 y lo hizo muy bien, hizo podios y ganó carreras, firmó por Suzuki y no le va tan mal. Le va bastante bien y es un ejemplo que he podido coger...
-Defienda Moto2, que parece de tránsito...
-No, no, no quiero dejar esa imagen ni mucho menos, Moto2 es una categoría que tiene un nivelazo. Algunos pilotos que no pueden llegar a MotoGP se estancan entre comillas en Moto2 y llevan muchos años y conocen muy bien la moto. Es un nivelazo brutal. Sí que es verdad que si llegas de ganar el Mundial de Moto3, en Moto2 empiezas a hacer podios a la sexta carrera y se te presenta un contrato en MotoGP, quién es el guapo que lo rechaza. Va muy rápido, pero que digan lo que quieran, porque es una oferta que no se puede rechazar. Yo tenía claro que, si venía una fábrica, subiría, y cuando vi el interés de Suzuki, se me encendió la bombilla y pensé: a éste.
-¿Le gustaría probar la MotoGP a escondidas lo antes posible?
-Sí que me gustaría, pero no creo que sea lo suyo. Lo mismo pasó el año pasado con Moto3. Querían que probara la Moto2. Soy partidario de acabar en Moto2, de hacerlo bien, de estar el ciento por ciento concentrado y el día que me baje de la moto subirme a la otra. Eso es lo que me gustaría hacer.