El ganador de Montmeló salió en 1ª línea el 88,8 de las veces

La repetición acaba con la casualidad y lo convierte en una estadística a tener en cuenta. El GP de España cumple su 28ª edición en el trazado barcelonés de Montmeló y la historia demuestra que para tener posibilidad de imponerse en la carrera hay que realizar una gran clasificación el sábado. De las 27 carreras celebradas ya nada menos que en 19 el ganador resultó el poleman. Un dato que crece al añadir la primera línea ya que se suman cinco triunfos más para el piloto que salió segundo. Es decir, en 88,8% de las ocasiones el vencedor es uno de los dos pilotos que sale en la fila más destacada en la parrilla.

De hecho únicamente tres pilotos han logrado derrotar a esa estadística y tampoco saliendo mucho más atrás. Michael Schumacher logró vencer desde la tercera plaza de la parrilla en 1996 con Ferrari, Max Verstappen desde la cuarta posición en su debut con Red Bull en 2016, y Fernando Alonso partiendo quinto en 2013 con Ferrari. Otro dato que deja claro la clave que supone la última sesión del sábado es que el pasado año tan sólo hubo 16 adelantamientos en el gran premio.

Importancia de la clasificación, y en especial de la pole, que coloca a Montmeló en la primera posición entre los actuales circuitos con más relevancia empatado con Singapur y sus 7 victorias del poleman en 10 carreras: 70%. Igual que el Circuit Barcelona-Catalunya, hecho el trazado catalán estaría incluso por delante ya que alcanza 70,3 al haber celebrado más citas de F1.

¿Y Mónaco? A la cabeza de todo aficionado le habrá venido el trazado urbano de Montecarlo y la duda sobre si hay un error... pero no. En 64 carreras el ganador partió 28 veces desde la pole (43,75%) y 43 desde la primera fila (67,1). Datos muy inferiores a Montmeló y es que los errores sin vuelta atrás allí, la condiciones meteorológicas y la gran cantidad de apariciones del 'Safety Car' que convierten a veces la victoria en una lotería rompen la ventaja de la pole.