2.723 días después, Red Bull revivió su peor momento en F1
Un fallo eléctrico e importantes daños en la transmisión provocaron los abandonos de Ricciardo y Verstappen, algo que no sucedía desde Corea del Sur en 2010.
No está siendo un inicio sencillo para Red Bull en el Mundial de Fórmula 1 2018. En un año donde los energéticos confiaban en poder luchar en igualdad de condiciones contra Mercedes y Ferrari, los Grandes Premios de Australia y Bahréin han dejado varios registros negativos para la escudería de Milton Keynes.
Comenzando por los kilómetros completados en carrera, Daniel Ricciardo y Max Verstappen son los pilotos que menor distancia han completado de la parrilla con 637. Especialmente dolorosa ha sido la prueba en Sakhir, donde ambos monoplazas tuvieron que abandonar la carrera antes de ver la bandera a cuadros.
Una situación que no se vivía desde hace ochos años en Corea del Sur, donde Mark Webber sufrió un accidente en la vuelta 19 y Sebastian Vettel rompió su motor a falta de 11 para el final, si bien en Italia hace seis años Vettel sufrió un problema con el alternador y Webber condujo su monoplaza hasta el garaje tras pedírselo el equipo al quedarse sin neumáticos por un trompo en Ascari.
En esta ocasión, el doble abandono en el golfo Pérsico se debió a un fallo eléctrico en el RB14 de Ricciardo y los importantes daños que presentaba la transmisión del coche de Verstappen tras su toque con Lewis Hamilton.
"Creo que en general todo va razonablemente bien. La situación es mejor que la del año pasado, eso seguro, pero sí, no es ideal", reconoció el australiano tras la prueba de Bahréin. La primera oportunidad para revertir esta fase será esta semana con motivo del Gran Premio de China 2018.