Las cinco conclusiones del GP de Bélgica: Force India, Alonso...

Hamilton es mejor que Vettel

Si Sebastian Vettel fuera mejor piloto que Lewis Hamilton habría ganado la carrera de Spa. El alemán falló llegado el momento porque tenía mejores neumáticos que su rival y la diferencia de rendimiento en condiciones normales entre el Mercedes y el Ferrari no era tanta. Tampoco es real que el coche italiano fuera mejor, como dice el inglés, porque los de la estrella han vuelto a hacer un gran coche. Pero con los ultrablandos Seb debió pasar a Hamilton y aprovechar la oportunidad. Quizá pensase en el campeonato, quizá es que Hamilton es mejor. Veremos…

Ricciardo, pura clase

Pero si Vettel no lo hizo, Ricciardo sí. El australiano tenía ventaja de gomas respecto a Bottas y lo aprovechó. También pudo con Raikkonen. Daniel es pura clase, un piloto en el que deben confiar en Red Bull porque tiene calidad para ser campeón del mundo, inteligencia en el pilotaje y valentía cuando se necesita. Es Zidane en la F1.

Force India, demasiado coraje

¿Cómo acabará esto de Force India? Ocon diciendo en 'Twitter' que su compañero le quiso matar, Pérez haciendo vídeos en 'Instagram'… Malditas (o benditas) redes sociales. La cuestión es que ambos han convertido esta historia en algo personal (¿no es todo personal?) y tiene difícil solución. En el equipo están desbordados.

Sainz, Toro Rosso al límite

No da más. Allá donde termina Carlos Sainz una carrera, y siempre que ha terminado lo ha hecho en los puntos, es donde puede llegar el Toro Rosso. No más. El madrileño hizo un fin de semana perfecto para lo que tiene y acabó puntuando en un circuito malo para su coche.

Alonso vete ya

¿Por qué le preguntaban los periodistas a Alonso si había parado a propósito el McLaren Honda? Quizá porque hubiera sido comprensible. Porque el asturiano, después del espejismo de Hungría, volvió a sufrir un coche, un motor… terrible. No puede seguir así. A donde sea, pero Fernando vete ya. O casi…