Masiá: "Correr en un gran premio compensa 10 años de trabajo"
Jaume Masiá salió en el FP1 de Moto3 por primera vez con los mundialistas, lo que supone un sueño hecho realidad a sus 16 años.
La declaración con la que se titula esta información lo dice todo: "Correr en un gran premio compensa 10 años de trabajo". Corresponde a Jaume Masiá, un piloto valenciano, de Algemesí, que a sus 16 años acaba de ver como su sueño empieza a hacerse realidad. Y es que este chaval de la Cuna de Campeones ha compartido por vez primera pista con los pilotos del Mundial. Lo ha hecho en el FP1 del GP de Austria, con un digno 24º puesto, a 1.6 de la cabeza que ha ocupado Mir con 0.354 de ventaja sobre Canet y 0.464 sobre Ramírez. Al joven Masiá le ha llegado la oportunidad para reemplazar provisionalmente al lesionado Darryn Binder y su cara de felicidad puede más en esta ocasión que su habitual seriedad, por tímido.
"Estoy muy contento y emocionado de estar aquí", ha dicho a AS tras bajarse de la KTM del Platinum Bay Real Estate, consiciente de que ha dejado por detrás a dos pilotos con podios en el Mundial, como son Migno y Guevara. "La verdad es que no me lo esperaba, aunque no he mirado mucho la clasificación. Estoy más centrado en trabajar, en poner la moto a punto, porque aún no está perfecta y tenemos margen para mejorar, pero estoy contento con el debut", asegura.
A Masiá, que en la actualidad marcha cuarto en la general del FIM CEV Repsol con tres podios en su haber, se le ha visto por los circuitos desde hace mucho tiempo, cuando aún era un renacuajo, y da gusto verle crecer, porque ha dado un estirón cuya ausencia le lastraba encima de la moto. En ese sentido, dice: "Ya mido 1.61 ó 1.62 y sólo llevo 9 kilos de lastre. Aquí son tres kilos más que en el FIM el peso mínimo del paquete moto-piloto (152 por 149), y es menos que los 21 kilos de lastre que llegué a llevar cuando estaba en Monlau. Llevo repartido el peso".
Sobre sus primeros 45 minutos como piloto mundialista, afirma que "lo que más impresiona es que en cada curva te pasa un piloto y es una pasada, porque en cada curva se aprende de un piloto. Es imposible quedarte estancado aquí y ya he tenido oportunidad de rodar con Ramírez, Canet o Loi". El gaditano es su compañero de box y le ha recibido con los brazos abiertos. "Es un placer estar al lado de él".
Su objetivo ante el primer GP de su vida es "mejorar tanda a tanda, progresar e intentar estar a gusto con esta moto. De momento es sólo para esta carrera y mi objetivo es hacerlo bien en el FIM CEV. He hecho dos ceros que me han hecho ir cuarto, pero me estoy consolidando en ese campeonato y ojalá este fin de semana sea un trampolín para estar un día en el Mundial".
Correr el Mundial es el objetivo de todo piloto que se precie como tal, y Masiá arrancó el camino hasta él "cuando sólo tenía seis años y es un camino muy duro, porque si no tienes la suerte de tener medios y un buen padrino, cuesta mucho llegar por tus medios. Yo estoy aquí porque me han llamado por mi trabajo en el FIM y estoy muy contento por ello. Sólo estar aquí este fin de semana y poder compartir pista con todos estos grandes es un placer y compensa tanto esfuerzo y trabajo".