Buggys UTV: una forma asequible de correr el Dakar
La organización intenta paliar el descenso de inscritos en coches con esta nueva categoría que reduce a la mitad el coste de participación.Rally Dakar 2019: españoles y pilotos más destacados en Perú
Correr en coche el Dakar se ha convertido en algo prohibitivo. Para asumir la prueba con ciertas garantías, pero sin grandes opciones deportivas, se necesita un desembolso de unos 300.000 euros, al alcance de muy pocos. Y si a uno le toca la Lotería, puede optar por alquilar un Mini a razón de 600.000 euros sólo por las dos semanas de la prueba. Por ello, el número de inscritos en esta categoría lleva descendiendo desde hace años. En la edición 2017, tan sólo 77. Y la solución son los UTV, una categoría de buggys que se estrena este año y que reducen a la mitad el coste de participación.
El coste de participación con uno de estos buggy oscila entre 140.000 y 160.000 euros. La organización del Dakar esperaba contar con una 20 de ellos en la salida, pero al final sólo se consiguieron 8, 5 Polaris y 3 Yamaha. Los participantes con los vehículos japoneses, entre los que se encontraban los españoles Joan Font y Santiago Navarro, y el andorrano Andreu Cachafeiro, se retiraron en las primeras etapas, y sólo quedan en carrera los Polaris, que etapa a etapa sustituyen numerosas piezas para evitar roturas.
Uno de los padrinos de esta nueva categoría es Stephane Peterhansel. Monsieur Dakar compitió en las Bajas de Italia y Portalegre en Portugal con un Yamaha copilotado por su mujer, Andrea Mayer (que fue piloto del Dakar en motos, coches y camiones), para verificar la validez de los buggys. De hecho, Peterhansel está desarrollando un kit para mejorar la competitividad y fiabilidad del Yamaha cara al Dakar 2018. El primer intento ha resultado fallido, pero muchos ven en esta vía la solución a la sangría de inscritos en coches que se viene produciendo desde hace años.