Hankook-DTM: una unión que se prolonga hasta el año 2019
La marca de neumáticos coreana y el Alemán de Turismos anunciaron la ampliación de su contrato en la primera carrera de la temporada en Hockenheim.
El ruido de los coches suena atronador pero Felix Kinzer, director de comunicación de Europa de Hankook, se esfuerza en elevar la voz para que no nos perdamos ni un detalle de su explicación mientras el suelo del Hospitality de la marca vibra bajo nuestros pies. Fuera, en la pista de Hockenheim, los pilotos luchan por la primera pole de la temporada. Kinzer no puede dejar de sonreír, sólo hace unas horas que anunciaron la renovación del contrato de colaboración con el DTM hasta 2019. Una “feliz” unión que comenzó en 2011. “Cuando en el DTM probaron por primera vez nuestros neumáticos se sorprendieron mucho de su rendimiento y calidad”, afirma orgulloso Kinzer, que sigue explicando la manera en la que trabajan con los equipos: “Tenemos dos ingenieros de Hankook trabajando con cada una de las tres marcas del campeonato (Mercedes, Audi y BMW) y a través de ellos recibimos el feedback de los pilotos, así sabemos qué piensan de nuestros neumáticos”.
El DTM es un campeonato tan igualado que los 28 pilotos están en un segundo, Hankook alaba esa igualdad y trata de aportar su granito de arena: “Los neumáticos son los mismos para todos los equipos, la presión es lo único que pueden personalizar”. “Elegimos el DTM ya que todos los coches son fabricantes”, dice Kinzer, algo que secunda Manfred Sandbichler, director de Motorsport en Europa de Hankook: “Es un perfecto escaparate para nuestros neumáticos ya que son modelos de coches similares a los que la gente tiene en sus casas y se pueden sentir más identificados que por ejemplo en la Fórmula 1”.
El principal propósito de la marca de neumáticos coreana es que los pilotos estén contentos con su rendimiento, eso ya lo han logrado y ha sido gracias que combinan a la perfección tres factores para lograr que los 1.000 neumáticos que llevan a cada carrera sean del agrado de los pilotos: “Debemos conseguir que los neumáticos sean rápidos y sobre todo seguros, y eso combinado con que no se disparen los costes”, dice Sandbichler que mira de reojo a otras competiciones: “La idea de llegar a la F-1 siempre está ahí, pero de momento es algo que no nos planteamos”. Quizás en el futuro, de momento lo único seguro es que cuando algo funciona no hay que cambiarlo y la unión DTM-Hankook seguirá funcionando, al menos, hasta 2019.