María Herrera: "Hay que asumir la presión y apretar fuerte"
La toledana asegura haber sufrido "mucho" a la espera de que se decidiera su futuro y está radiante con la noticia de su regreso, con una KTM en Laglisse.
-¿De verdad que podemos decir ya sin temer que vuelva a haber cambios que estará en la parrilla de Qatar de Moto3 el 20 de marzo?
-(Se ríe). Ya no hay vuelta atrás. Ya me lo han confirmado a mí también y estoy muy contenta de esta noticia, porque se ha luchado mucho para que así sea, con una KTM en el equipo Laglisse.
-¿Qué siente ante una oportunidad así y, sobre todo, con todo lo que ha costado que salga adelante?
-Que hay que aprovecharla al máximo porque, al retirarse el equipo, le ha costado mucho a mi padre y a un amigo el dinero invertido. Me da pena que haya tenido que ser así, pero tengo que aprovechar este año como sea.
-¿Cómo va a llevar la presión extra que supondrá saber que ha sido la familia la que se ha rascado el bolsillo para que pueda correr en el Mundial?
-Hay que quitarse de encima la presión, porque si no se disfruta no se hacen bien las cosas. Mi padre ha confiado en mí, porque sabe que puedo hacerlo bien y quiero corresponderle. Hay que entrenar a tope para estar fuertes este año.
-El día del Padre coincidirá con el primer GP de la temporada. Ya puede estirarse con el regalo del suyo tal y como se ha portado...
-(Risas). ¡Una buena carrera en Qatar seguro que le vale! Le tengo que estar muy agradecida, porque ha hecho un gran esfuerzo para que yo esté aquí.
-¿Lo ha pasado muy mal durante estas semanas?
-He intentado mantenerme ajena a lo que pasaba, pero la verdad es que he sufrido mucho. Me mareaban mucho y no sabía lo que iba a pasar. Surgió lo de correr en el RBA, luego no, luego que sí y otra vez que no. Me ha costado mantenerme al margen.
-¿Será este el trampolín de una larga aventura mundialista?
-Yo creo que sí, que de esto se aprende y te hace cogerlo con más ganas. Al saber lo que es estar sin moto seguro que aprovecho bien la oportunidad.
-Imagino que también será muy bueno repetir con el equipo Laglisse, porque se conocen mutuamente. ¿Es así?
-Sí, porque eso supone conocer ya a los mecánicos y con mi técnico tengo muy buena relación y me conoce muy bien. Creo que podemos funcionar bastante bien de cara a este año, porque es un punto a favor tener del año pasado la información de la puesta a punto de cada circuito.
-¿Su KTM será una pata negra tan buena como la de los demás?
-Sí. La primera prueba va a ser en los entrenamientos IRTA de la semana que viene. La moto va muy bien. Mis compañeros de marca han ido rápido con ella y estoy deseando probar mi nueva moto.
-¿Qué hubiera sido de María Herrera si su padre no consigue el dinero necesario para poner en marcha este proyecto de medio millón de euros?
-La verdad es que no lo sé. No sé si hubiera bajado al CEV o qué hubiera hecho. Bajar al CEV hubiera sido un palo gordo y no me lo he planteado.
-¿Qué objetivo se va a marcar?
-Hay mucho más nivel este año, porque todo se está igualando mucho, y hay que intentar estar en los puntos y luchar con los tiempos de cabeza. Hay que apretar desde el principio y asumir la presión.
-El año pasado puntuó en tres carreras, Montmeló, Aragón y Australia. ¿En qué cree que va a mejorar comparado con el año pasado?
-El año pasado tuve bastante mala suerte. En muchos circuitos estuve delante y me tiraron. Tengo que mejorar en los circuitos que no conocía. Es una categoría muy competida y creo que Bastianini volverá a estar igual de fuerte que el año pasado, y lo mismo con Antonelli y todos los que estuvieron el año pasado delante.
-Mucha suerte, María.
-Muchas gracias.