Más allá del asunto neumáticos lo cierto es que en cuanto a tiempos a una vuelta al menos el dominio de Red Bull resulta insultante para el resto de los equipos. Vettel, como suele, volvió a ocupar la primera posición, aquí seguido muy cerca, a 59 milésimas, de su compañero Mark Webber. Después el abismo. Grosjean y Massa a poco más de ocho décimas. Vergne y Raikkonen a nueve. Y séptimo Fernando Alonso, a más de un segundo.
El asturiano se centró en probar las distintas piezas que deberían ofrecerle más agarre aerodinámico a su Ferrari, pero en todo momento se mostró excesivamente nervioso el coche. “Pudimos extraer pocas conclusiones, por la mañana dimos pocas vueltas y después tampoco mucho más”, explicó el español.