Sainz lleva medio Mundial en el podio

A sus cuarenta y dos castañas sigue aferrado al podio. Carlos Sainz, el abuelo del Mundial, sumó en Cerdeña su sexto cajón de trece pruebas disputadas, y el 94 de su carrera deportiva. Es decir, en la mitad de las carreras disputadas ha estado ahí. La parte mala de este nuevo éxito es que el ganador fue Solberg, que se escapa ligeramente del madrileño en la pelea por el subtítulo.

Las cosas no pintaban bien para el madrileño en los inicios de la jornada final, ya que Markko Martin le estaba atacando y parecía que le podía robar esa plaza de podio. Carlos seguía griposo y Markko era difícil de contener. Pero el motor del Focus del estonio se rompió, dejando el camino libre al español hacia el cajón.

El que no ha dado opción ha sido Petter Solberg. Ayer ganó cuatro de los seis tramos disputados, y en el total del rally se ha impuesto en 13 de las 19 especiales de la prueba italiana. Suma así su quinto triunfo del año, el tercero consecutivo, y pone la directa hacia el subcampeonato, con 13 puntos de ventaja sobre Sainz.

Pero la contienda entra ahora en terreno favorable para el madrileño y su Xsara, ya que se pasa al asfalto de Córcega y Cataluña. Además, allí los neumáticos Pirelli del Subaru del noruego suelen ser muy inferiores, por lo que aún quedan esperanzas fundadas de que Carlos sea subcampeón. Con su segunda plaza de ayer, Loeb se mantiene firme en cabeza, con 26 puntos de ventaja sobre Solberg, por lo que en su casa, en Córcega, se proclamará campeón.

Citroën puede alcanzar la corona en España

La categoría júnior ha vivido un festival de Suzuki. Cuatro vehículos de esta marca han copado las cuatro primeras posiciones de la clasificación, y dos de sus hombres, Guy Wilks y el ganador en Cerdeña, Per Gunnar Andersson, marchan en cabeza del campeonato. El español Xevi Pons, por su parte, sigue sin cogerle el aire a la categoría, y ayer se retiró tras sufrir una salida y dañar su radiador, según él, porque una avería de embrague le impedía conducir concentrado. Xevi Pons por su parte sigue sin cogerle el aire a la categoría, y ayer se retiró tras sufrir una salida y dañar su radiador, según él, porque una avería de embrague le impedía conducir concentrado.

Abandono de Xevi Ponsen Júnior

Carlos Sainz terminó muy satisfecho después de alcanzar el podio. El proceso gripal que sufría le dejó exhausto, pero contento: Ha sido una prueba muy dura. Un rally desconocido para todos, con pistas estrechas, rápidas algunas veces, muy polvorientas y en las que había que estar en una perfecta condición física. Yo llegué un poco acatarrado y aquí se agravó la situación, con congestión en los ojos, garganta, sin poder dormir bien por la noche y además en una lucha permanente a lo largo de los tres días. El esfuerzo se ha visto recompensado.

Carlos: "Es la recompensa a mi esfuerzo"

Los Citroën no se bajan del podio, y por eso tienen a tiro ya el título de marcas. Si no lo consiguen también en Francia (como el de pilotos de Loeb), será en España, su segundo mercado más importante, donde se coronen. Si aprovecha su oportunidad, Sainz podría acortar distancias con Solberg en el asfalto catalán.