La CPU de PS5 reducirá “significativamente” los tiempos de desarrollo
La velocidad del procesador de la consola permitirá que los equipos tengan menos restricciones a la hora de materializar sus videojuegos.
La próxima generación de consolas, con Xbox Scarlett y lo que conocemos bajo el nombre no definitivo de PS5 a la cabeza, deja de ser un tema tabú y se está convirtiendo en una realidad, al menos en los estudios de videojuegos. Los kits de desarrollo son ya parte de muchas oficinas y, en base a las primeras impresiones de las desarrolladoras, los pasos adelante en potencia, capacidades y rendimiento será más que significativas.
La nueva voz que ha hablado sobre la siguiente generación de Sony es Tim Ash, de BoxFrog Games, desarrolladores del título de combates aéreos Lost Wing. En un encuentro con GamingBolt, Ash ha tildado la CPU de PS5 como “un gran paso adelante”. A eso añade que “Se deshace de muchas restricciones y nos permite hacer muchísimos cálculos sobre la marcha; tenemos muchas ideas que son muy difíciles, casi imposibles de materializar en la presente generación de consolas”, añade, dejando entrever que, en efecto, el actual ciclo de máquinas ya no da más de sí en proyectos de gran ambición tecnológica.
“También reduce significativamente os tiempos de desarrollo a necesitar estar menos tiempo optimizando el juego”, concluía. Es una mera cuestión matemática: a menos trabajo de optimización, menos tiempo de desarrollo.
Qué sabemos de PS5: nueva GPU, velocidad, eficiencia…
Si hacemos un pequeño repaso de lo que sabemos acerca de PlayStation 5 podemos poner sobre la mesa unas cuantas cosas. Lo primero —y para muchos muy importante— es la incorporación de una memoria SSD, lo cual garantizará unos tiempos de transferencia y carga de datos mucho más rápida; esto afectará también a los tiempos de carga en los videojuegos.
También tenemos información oficial acerca de la GPU, que se basará en la nueva arquitectura RDNA de AMD. El pasado mes de mayo se presentó en la feria Computex la nueva generación de tarjetas gráficas con arquitectura Navi de AMD, las que se alojarán en el chasis de la consola de Sony. Mark Cerny, arquitecto de la máquina, ya adelantó que usará una GPU AMD Navi y una CPU Ryzen Zen 2. La novedad, por ende, viene en el nombre de dicha nueva arquitectura, que no será GCN sino RDNA.
Estas sigas se pueden resumir, sobre el papel, en un rendimiento x1.5 veces mayor por vatio. Asimismo, el rendimiento por núcleo mejorará en x1,25 veces respecto a la generación anterior. Su IPC también ganará en eficiencia —lo que más desean desarrolladores como Katsuhiro Harada—, mientras que su caché multinivel podrá garantizar una latencia mejor que la actual arquitectura; esto se traducirá en un mayor ancho de banda y un consumo inferior. Es decir, de nuevo, una mayor eficiencia en su cómputo global.
Teniendo en cuenta que también ofrecerá una mayor velocidad por núcleo y velocidad de computación de reloj, parece que las pruebas mostradas por Sony en el Sony IR Day 2019 son plausibles. En dicho foro, Sony Computer Entertainment mostró en forma de vídeo los tiempos de carga de la ciudad de Manhattan en Marvel’s Spider-Man para PS4 Pro y PS5; los tiempos pasaron de unos 8 segundos a tan solo 0,8 segundos, un tiempo de espera casi inapreciable para un fundido a negro.
Desconocemos, al menos a fecha de hoy, la fecha de lanzamiento de este nuevo hardware de Sony, pero sí que tendrá un precio “atractivo”, según el criterio de Mark Cerny. La comunidad de jugadores ya ha hecho sus apuestas sobre ese posible precio.