5 años de Xbox One, 5 hitos de la consola
La máquina de Microsoft empezó con paso tambaleante y unas políticas que no gustaron, pero ha sabido reponerse a las adversidades y ofrecer los alicientes necesarios a los jugadores.
Poco queda de la idea primigenia de Xbox One, esa que nos vendió el antiguo máximo dirigente de la división, Don Mattrick. La perspectiva de una máquina en la que los juegos tuvieran que someterse a un proceso de activación no se encontró unicamente con la oposición de los jugadores, sino también de los grandes comercios. Ante esa perspectiva, la idea inicial se derrumbó como un castillo de naipes.
Fue el 22 de noviembre de 2013, hace cinco años, cuando los de Redmond comercializaron su flamante consola. Ahora que se cumple el quinto aniversario, repasamos los cinco grandes hitos de la consola.
La dependencia de Kinect
La versión 2.0 de Kinect, el dispositivo de control gestual y de sonido por el que tanto apostaron en Microsoft, estaba incluido en todos los packs de la consola. Esta decisión fue a grandes rasgos contraproducente, pues el precio de la máquina se encareció en 100 euros con respecto a la competencia, PlayStation 4. Todo esto, unido al desastre que supuso la estrategia inicial, hizo mucho daño al prestigio de Xbox One y de la división.
Más tarde, Don Mattrick abandonó la compañía para fichar por ZYNGA: “Me uno a ZYNGA porque considero que la visión de Mark es pionera y única en el mundo. Zynga todavía tiene que despegar y mostrar su potencial. Me entusiasma trabajar con Mark para ofrecer juegos a todo el mundo en cualquier parte", declaró Mattrick en su momento. De todas formas, la marca no se ha despojado por completo de estos errores, aunque no se puede decir que no hayan hecho todo lo posible para enmendar la situación.
Windows 10 y Xbox One, nuevos aliados
Microsoft tenía a su disposición la tecnología, pero todavía no la había aplicado del todo a Xbox One. Windows 10, la última versión de su sistema operativo, tenía la ventaja de que casi todos los desarrollos en PC se realizan para esta plataforma. Por lo tanto, la consola se beneficiaría indudablemente bajo el paraguas de Windows 10. Durante la conferencia que Microsoft organizó en el E3 2016, los de Redmond anunciaron una de las novedades más interesantes: Xbox Play Anywhere. Desde entonces, todos los productos lanzados bajo el sello de Microsoft se lanzan tanto en PC como Xbox One.
Ese movimiento dejó estupefacto a cierto sector de los jugadores, puesto que el movimiento implicaba que no habría ningún título verdaderamente exclusivo. Sea como fuere, los compradores de la versión digital del juego en cualquiera de las dos plataformas reciben la otra versión. Recientemente, la actual cabeza de la división, Phil Spencer, reconoció que todavía había mucho trabajo por hacer en lo que respecta a la tienda de Windows 10.
Nuevas versiones de la consola: Xbox One S y Xbox One X
La industria cambia y Microsoft no se ha mantenido ajena a las diferentes tendencias. 2016 fue el año en el que se escucharon por primera vez dos nombres en clave: PS4 Neo y Scorpio. A final, los rumores terminaron confirmándose, pero antes de que Microsoft lanzara su consola más potente, comercializó un modelo refinado de la máquina. Xbox One S no solo era bonita y compacta, sino que además ofrecía un rendimiento ligeramente superior.
Xbox One X, con sus 6 teraflops, 12 gigas GDDR5 y una CPU custom con un procesador de 8 núcleos a 2,3GHz, ha supuesto un paso adelante. Mejores gráficos y resolución mejorada, que puede llegar a alcanzar los 4K.
Xbox Game Pass, el 'Netflix de los videojuegos'
Primero se dijo que el futuro sería digital, que lo físico desaparecería para nunca volver, que el formato en caja estaba muerto y enterrado, sepultado entre una pila de descargas. Luego se habló del streaming como servicio, que ya funciona en la televisión gracias a plataformas como Netflix, HBO o Hulu. Pete Hines de Bethesda tiene claro que el futuro es a través de la red, al igual que gente de otras empresas como Ubisoft. De momento, en los videojuegos, existen servicios como PlayStation Now, que no ha llegado a España, y otros destinados al PC.
Con todo, Xbox Game Pass es un servicio que a día de hoy no funciona en streaming, aunque Microsoft tenga sus propios planes al respecto. Sea como fuere, este servicio de suscripción es todo un caramelo. Una vez suscrito, el usuario puede acceder a un enorme catálogo de videojuegos. Tras descargar el título que desee en su consola, tiene acceso a él siempre y cuando continúe como suscriptor. Es cierto que cada mes se eliminan juegos, pero también se incorporan otros nuevos. Además, lo más interesante es que todas las producciones first party de la consola se añaden al catálogo en el día de su lanzamiento.
La retrocompatibilidad, uno fantástico acierto
El debate sobre las remasterizaciones es habitual dentro de las comunidades de jugadores. ¿Son necesarias o se lanzan para conseguir dinero fácil? Los puntos de vista son diversos, pero lo que está claro es que Microsoft ha sabido jugar bien sus cartas. La retrocompatibilidad en Xbox One se realiza por software, de modo que la compañía tiene que adaptar cada uno de los juegos de manera independiente.
La novedad más reseñable es que todos esos títulos mejorar de una u otra forma, aunque las diferencias son más palpables en Xbox One X. Por ejemplo, la trilogía de Lighting, Final Fantasy XIII, que corría a una resolución muy baja en Xbox 360 (1024x576 ), luce ahora a 3072x1728, un salto abismal. Por otra parte, también se ha mejorado el rendimiento y los vídeos, que en la máquina de anterior generación se veían muy borrosos debido a la compresión. Para la nueva versión, Square Enix ha proporcionado esas mismas cinemáticas con resolución HD (720p).
Xbox One sopla las velas en su mejor momento. No, no es líder de ventas ni tampoco logra batir el ritmo de Nintendo Switch. Sin embargo, ha abierto un camino esperanzador que se desarrollará en la próxima generación de consolas, cuando la denominada Xbox Scarlett haga acto de presencia. Se le achaca la falta de exclusivos, pero la división ya se ha puesto en marcha y anunciado la compra de estudios de prestigio, entre ellos Ninja Theory y Obsidian Games. El futuro, futuro será. Mientras tanto, ¡muchas felicidades!