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Tekken 6

Tekken 6

Tekken 6, guía completa - Cronología de la saga

El sexto torneo Rey del Puño de Hierro acaba de comenzar. Te ayudamos a ser más rápido, más fuerte y más mortífero con una guía en la que se recopilan las técnicas de combate más efectivas a la hora de hacer morder el polvo al rival, y también te revelaremos algunos de los secretos más recónditos del juego.

Aviso para navegantes: aunque aquí se desvelarán los hechos acaecidos a lo largo de toda la saga Tekken, en lo referente a su sexta y última entrega sólo se reseñarán los prolegómenos, por lo que no hay que temer por posibles spoilers a la hora de leer.

Antes de Tekken

Desde tiempos inmemoriales, el clan Mishima ha sido considerado uno de los más respetados en Japón en lo que a artes marciales se refiere. Maestros en su propio estilo de lucha (el denominado Karate Mishima Ryu), el clan Mishima también lleva décadas destacando en otros ámbitos de la sociedad japonesa gracias a su conglomerado empresarial conocido como Mishima Zaibatsu. Sin embargo, llegan vientos de cambio. Jinpachi Mishima, actual patriarca del clan, planea convertir la entidad en una multinacional de renombre, aunque los planes para llevar a cabo dicha empresa chocan frontalmente con los de su hijo, Heihachi, el cual proyecta transformar Mishima Zaibatsu en una de las compañías militares privadas más poderosas del mundo, así como uno de los principales contratistas armamentísticos a nivel global. Horrorizado por los planes de su hijo, Jinpachi trata de pararle los pies por todos los medios, aunque nada parece poder detener la desenfrenada ambición de Heihachi.

Sin dudarlo un solo instante, Heihachi propina una monumental paliza a su padre y lo entierra en vida bajo uno de los templos pertenecientes al clan Mishima, dejándole así morir de inanición. Sin nadie ya para detenerle, el ahora nuevo patriarca de los Mishima acaba transformando la corporación en todo aquello que ambicionaba. Transcurridos algunos años desde la entrada de Mishima Zaibatsu en el mercado armamentístico internacional, la empresa ya es uno de los conglomerados más influyentes del orbe terráqueo, todo gracias a la total falta de escrúpulos de Heihachi. Dicha falta de escrúpulos también es sufrida por su hijo, Kazuya, quien empieza a ser maltratado desde muy temprana edad; y es que el desenfrenado odio de Heihachi se desata sobre todo en su retoño, quizá por ser el que más cerca tiene. Aunque comenzó a entrenarle en Karate Mishima Ryu prácticamente desde que aprendió a andar, las clases eran en realidad verdaderas sesiones de castigo en las que Heihachi propinaba a su hijo tremendas palizas de las que el joven a duras penas podía recuperarse.

Los maltratos llegaron a su punto culminante cuando Kazuya, con tan solo cinco años de edad, acabó siendo arrojado por Heihachi a lo más profundo de un precipicio. El despiadado líder de la corporación Zaibatsu, mientras veía como su hijo se hundía en un abismo cuyo fondo la vista no podía alcanzar, clamó a los cuatro vientos que si Kazuya quería ser su heredero debía sobrevivir a la caída y volver a subir por sus propios medios. Tras tan dramático desenlace, Heihachi se dio la vuelta y simplemente se olvidó de que su hijo había existido.

Tekken

Tanto el poder como la influencia de Heihachi no hacían sino crecer a cada día que pasaba. Todo aquel que osaba interponerse en su camino acababa siendo aplastado sin el menor de los miramientos, hasta que un hombre joven cometió la osadía de desafiarle abiertamente. Heihachi no pudo evitar sorprenderse cuando descubrió que dicho joven no era otro que Kazuya, quien se había convertido en un luchador imbatible que ahora retaba a su padre por el control de la corporación Mishima Zaibatsu. En respuesta, Heihachi decide convocar el primer torneo Rey del Puño de Hierro, asegurando a Kazuya que le cederá el control del poderoso conglomerado en caso de que logre derrotarle en el combate final. Lo que Heihachi no sabía era que Kazuya logró esquivar la muerte segura a la que su padre le condenó cuando tan solo tenía cinco años de edad gracias a la mediación de un misterioso ser demoníaco, el cual dotó al menor de los Mishima de increíbles poderes sobrenaturales.

Kazuya logra acceder a la final del primer torneo Rey del Puño de Hierro, no sin dificultades dado que en dicho campeonato se dan cita muchos otros luchadores de enorme talento provenientes de todos los rincones del orbe terráqueo. En el combate final entre padre e hijo, el menor de los Mishima no duda en usar sus nuevos poderes demoníacos para derrotar y humillar a Heihachi con insultante facilidad. Tras esto, Kazuya arroja a su odiado progenitor por el mismo abismo en el que él casi acabó perdiendo la vida años atrás. La corporación Mishima Zaibatsu tiene ahora un nuevo dueño, el cual es incluso más despiadado que el anterior debido a la influencia del gen diabólico que recorre todo su ser.

Tekken 2

A pesar de que el gen diabólico consumía con cada vez mayor velocidad la voluntad de Kazuya, éste no hacía nada por intentar cambiar su situación. Desde pequeño sólo había conocido odio, rencor y dolor, y en eso volcaba ahora su existencia, con la diferencia de que el dolor lo infligía en los demás en lugar de padecerlo él. Todo había sido culpa de su padre; un padre que no pensaba rendirse fácilmente, y es que la enfermiza determinación de Heihachi parecía no tener límites. Sin que Kazuya lo supiera, el patriarca del clan Mishima se agarró a un saliente tras ser arrojado al abismo, lo que le permitió salvar la vida. Tras un intenso entrenamiento, Heihachi salió a la luz y cambiaron las tornas: ahora era el padre quien desafiaba al hijo.

El enfrentamiento tuvo lugar, como no, en un segundo torneo Rey del Puño de Hierro, durante el que Kazuya se reencontró con Jun Kazama, una vieja amiga de la infancia y única persona que consiguió arrojar algo de luz a su tenebrosa existencia actual. En la gran final del torneo fue Heihachi quien finalmente consiguió derrotar a su hijo pese a que éste hacía gala de unos poderes demoníacos aún más potenciados. Para asegurarse de que no volvería a causar problemas, Heihachi acabó arrojando el cuerpo inerte de Kazuya al interior de un volcán. Todo parecía haber terminado, y de hecho así fue durante un largo periodo de tiempo.

Tekken 3

Han pasado quince años desde los hechos acontecidos en Tekken 2. La corporación Zaibatsu está más que asentada como una de las compañías militares privadas más poderosas del mundo. Heihachi utiliza con cada vez mayor eficacia sus crecientes influencias para desencadenar cruentas guerras en los lugares más conflictivos del planeta, las cuales le aportan suculentos beneficios económicos y aún más poder. Sin embargo, algo inquieta al líder de la corporación Zaibatsu. De todas partes comienzan a llegar noticias acerca de unos misteriosos asesinatos en los que todas las víctimas sonluchadores experimentados, muchos de los cuales habían participado en el último torneo Rey del Puño de Hierro celebrado quince años atrás. Los rumores que llegan al líder de la corporación Zaibatsu hablan de una misteriosa entidad sobrenatural dotada de un enorme poder. Algunos se refieren a dicha entidad como Ogre. ¿Tendría algo que ver dicho ser con el demonio que largo tiempo atrás otorgó poderes a Kazuya? Heihachi pensó que, si lograba capturar a aquel ser, tal vez él también podría obtener dichos poderes.

Una de las últimas víctimas de Ogre conocidas es Jun Kazama, hábil luchadora que tomó parte en el último torneo Rey del Puño de Hierro celebrado quince años atrás. Jin Kazama, hijo de dicha mujer, decide presentarse ante Heihachi para revelarle lo que Jun le contó poco antes de morir: él era hijo de Kazuya, y por tanto nieto del patriarca del clan Mishima. Quería ser entrenado en el mortal arte del Karate Mishima Ryu para así poder vengar a su madre. Heihachi, una vez descubrió que el gen diabólico que antaño poseyó a su hijo había sido heredado por Jin y permanecía latente en su interior, decidió engañar a su nieto siendo benevolente con él e instruyéndole en artes marciales, todo mientras intentaba descubrir algún método para poder hacerse con los poderes ocultos en el interior del joven.

Pasan varios años sin que nada vuelva a saberse de aquel misterioso Ogre, por lo que Heihachi decide finalmente convocar el tercer torneo Rey del Puño de Hierro, sabedor de que aquel inquietante ser volverá a hacer acto de presencia en cuanto los mayores expertos en artes marciales del planeta se reúnan para combatir. Por aquel entonces Jin Kazama cuenta ya con 19 años de edad y se ha convertido en todo un experimentado luchador. Como es de esperar, la final del torneo es entablada entre Heihachi y su nieto. Al poco de comenzar el combate, Ogre hace al fin acto de presencia, por lo que los dos Mishima aúnan fuerzas para derrotarle.

Sin embargo, Heihachi no logra hacerse con los poderes de aquel extraño ser, ni consigue hallar algún método para que el gen diabólico latente en el interior de Jin pase a sus manos. Frustrado por no obtener ningún resultado tras tantos esfuerzos, y dado que su nieto ya no le sirve para nada, decide asesinarlo sin miramientos con un disparo a quemarropa. Es en ese mismo instante cuando se manifiesta el poder oculto en el interior de Jin, permitiéndole tanto sobrevivir a la mortal herida como escapar de las garras de su abuelo sin que éste pueda hacer nada por evitarlo. Desde entonces, la obsesión de Heihachi por dar con su nieto comienza a crecer desmesuradamente a cada día que pasa. Aquel poder era asombroso y lo quería para él. Juró obtenerlo a cualquier precio, aunque para ello tuviera que diseccionar a Jin como si fuera una rata de laboratorio.

Tekken 4

Las muestras de tejido tomadas de Ogre, analizadas por los científicos de Mishima Zaibatsu con la intención de crear soldados genéticamente alterados, no dejan de dar resultados infructuosos. Parece ser que el único gen diabólico con verdadero potencial es el originalmente poseído por Kazuya y que en la actualidad impregna el cuerpo de Jin. Pero el joven lleva dos años desaparecido, por lo que las ambiciones de Heihachi no dejan de caer en saco roto. Es entonces cuando un tercer e inesperado elemento entra en juego: su hijo Kazuya, cuyo cuerpo inerte y demacrado había sido rescatado largo tiempo atrás por la Corporación G, principal rival de Mishima Zaibatsu, había regresado a la vida. Sin embargo, ahora Kazuya no solo quería arreglar cuentas con su padre, sino también asesinar a Jin, su propio hijo, ya que éste le había arrebatado los poderes demoníacos involuntariamente al ser concebido.

Heihachi organiza un cuarto torneo Rey del Puño de Hierro al tiempo que decide que el premio para el vencedor sea ni más ni menos que el control de la corporación Zaibatsu, sabedor de que así Kazuya no podrá evitar acudir a la llamada. Jin Kazama, quien durante sus dos años en la sombra se ha entrenado en una rama más convencional de kárate junto a un legendario maestro para así cortar todos sus lazos con el clan Mishima, decide entrar también en el torneo, sabedor de que el único camino para poder llevar una vida normal sin verse obligado a ocultarse continuamente es el de acabar con Heihachi. La nueva batalla desencadenada entre los Mishima se entabla finalmente en uno de los templos del ancestral clan, oculto en la profundidad de un bosque. Jin, Kazuya y Heihachi emprenden un mortal combate de todos contra todos del que finalmente Jin sale vencedor. Sin embargo, el joven decide huir en lugar de quedarse para rematar tanto a su padre como a su abuelo, sabedor de que tomar vidas, aunque fueran las de aquellos dos despreciables seres, no le haría ser mejor que ellos.

Tekken 5

Heihachi y Kazuya recuperan el conocimiento poco después de la marcha de Jin. Es entonces cuando el templo es asaltado por un batallón de robots militares clase Jack cuyo número crece exponencialmente a cada segundo que pasa aún a pesar de que padre e hijo acaban decidiendo aunar esfuerzos para deshacerse de ellos. Tras varios minutos de intenso combate, los Jacks acaban entrando en una secuencia de autodestrucción, lo que hace que Heihachi baje la guardia lo suficiente como para que Kazuya acabe lanzándolo hacia los robots. Cinco segundos más tarde, el templo salta por los aires. Kazuya sobrevive a la deflagración, aunque Heihachi es dado por muerto. Con Jin nuevamente desaparecido y Kazuya sin tener ya ningún interés en hacerse con las riendas de la corporación Zaibatsu, el poderoso conglomerado parece condenado a la extinción.

Sin embargo, pocas semanas después un nuevo líder toma sus riendas. Se trata ni más ni menos que de Jinpachi Mishima. El templo bajo el que Heihachi enterró vivo a su padre décadas atrás resultó ser el mismo que sufrió el ataque de los Jacks, lo que permitió a Jinpachi abandonar su cautiverio. El patriarca del clan Mishima era consciente de que debería estar muerto, al igual que notaba como algo demoníaco crecía en su interior; algo poderoso que amenazaba con apropiarse de su voluntad; algo tan poderoso como para acabar arrasando el planeta de un extremo a otro. Rápidamente, Jinpachi convoca el quinto torneo Rey del Puño de Hierro con la esperanza de que alguno de los luchadores participantes en el certamen cuente con la habilidad suficiente como para matarle antes de que sea demasiado tarde.

El luchador que acaba accediendo a la final, encarándose con un Jinpachi ya totalmente poseído por el maligno poder que aún le mantiene con vida, no es otro que Jin Kazama. Jin se encuentra en una situación idéntica a la de su bisabuelo, ya que el gen diabólico latente en su interior comienza a tomar el control tanto de su cuerpo como de su mente. Tras un cruento combate, el más joven de los Mishima acaba con la existencia de Jinpachi y toma las riendas de la corporación Zaibatsu, por lo que el destino del mundo sigue pendiendo de un hilo.

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Con el poderoso conglomerado en su poder, el ahora diabólico Jin está listo para instaurar un nuevo orden mundial. En su camino únicamente se interpone la Corporación G, quien lleva décadas siendo la principal rival de Mishima Zaibatsu. Dicha organización se encuentra liderada en la actualidad por el mismísimo Kazuya, el cual es visto por la opinión pública como un héroe destinado a librar al mundo del mal que lo acecha, un mal encarnado en Jin Kazama y la corporación Zaibatsu. Pero la pretensión de Kazuya se encuentra alejada de cualquier atisbo de heroísmo: lo único que el ahora líder de la Corporación G sigue deseando es matar a su hijo, para que así le sea reinstaurado el gen diabólico que Jin le arrebató involuntariamente al ser engendrado.

Finalmente, la Corporación G decide ofrecer una cuantiosa recompensa que podrá ser reclamada por quien consiga poner en bandeja la cabeza de Jin Kazama. Como respuesta, sabedor de que su poder jamás podrá ser igualado, el actual líder de Mishima Zaibatsu convoca el sexto torneo Rey del Puño de Hierro, asegurando que será allí donde se enfrentará a cualquiera que ose desafiarle. Lo que nadie esperaba era que el último enfrentamiento desencadenado entre Kazuya y Jin acabara propiciando la entrada en escena de un tercer elemento: Azazel, una entidad diabólica infinitamente más poderosa que Ogre. Destructor de mundos, heraldo del apocalipsis, su origen está envuelto en un oscuro manto de misterio. ¿Es Azazel el demonio con el que Kazuya selló un pacto largo tiempo atrás, propiciando el origen del gen diabólico que ahora se halla en el interior de Jin? El sexto torneo Rey del Puño de Hierro acaba de comenzar, y será allí donde se dé respuesta a ésta y muchas otras preguntas.