Secret Files: Tunguska, guía completa - El final

EL FINALPor un momento Nina piensa que toda va a salir bien. Max está aquí y los miembros de la secta no parecen ser tan malos como pensaba y, sobre todo, su padre se encuentra aparentemente bien. Sin embargo, todo esto parece demasiado bonito para ser verdad. Difícilmente puede sorprenderle que las puertas se cierren de repente y se vea separada de Max una vez más. Por eso tiene que cuidar de sí misma de nuevo. Afortunadamente Max, por lo menos, está pendiente de las cámaras.Nina vuelve abajo usando el ascensor, donde rompe el carámbano utilizando la señal. Y después de que haya examinado de cerca el alojamiento, se le ocurre un plan. Debe poner el barril con el potente explosivo químico en contacto con el hielo, lo que causará una explosión de gran magnitud, y preferiblemente sin que le haga saltar por los aires también.Para hacer esto, ata el carámbano a la cadena y lo coloca entre las tuberías. Se guarda la tuerca que salta en el proceso así como la llave inglesa.Según se caliente la tubería, el carámbano se fundirá lentamente para caerse finalmente de las tuberías y golpear el barril, tirándolo de la estantería al suelo. Al menos este es el plan, pero desgraciadamente no está funcionando la calefacción aquí abajo. Lo primero que tiene que hacer es abrir la válvula del radiador. Debe utilizar la llave roscadora para abrir la válvula. Nina pone entonces una tuerca, prolonga la llave inglesa empleando la señal y la utiliza para accionar la válvula. Desgraciadamente el radiador no está cogiendo mucha temperatura. Aparentemente no hay suficiente agua en las tuberías. Necesita la ayuda de Max, ¿pero cómo puede Nina contactar con él? ¡Eso, justo, a través de las cámaras! Utiliza la silicona con la señal de peligro en la que el símbolo del agua aparece tachado. Coloca la señal delante de la cámara y apunta hacia el radiador, con lo que Max llega a la conclusión correcta y aumenta la presión del agua. Sin embargo, aparentemente el radiador no está lo suficientemente caliente. Necesita algo más de calor. Y Max averigua también lo que le quiere indicar esta vez Nina cuando pone delante de la cámara el encendedor. Lamentablemente, comprueba también el peligro que corre Nina cuando aparece súbitamente Oleg detrás de ella y se la lleva con él hasta el laboratorio. La cuestión es que el carámbano ya se ha comenzado a fundir y el tiempo juega en contra de ella.Sin embargo, Nina consigue urdir un plan. Ya se conformaba con que Oleg dejara de interferir continuamente en sus planes. Ella le da el huevo y Oleg se marcha con él. Nina aprovecha su libertad (aunque algo limitada) para investigar un poco en el laboratorio. Dar un vistazo a la pantalla y charlar brevemente con Massimo, le da la idea de cómo bloquear una máquina tan sensible. Ella lanza su teléfono móvil a la máquina y aprovecha el caos que se organiza para dirigir la cámara hacia la grúa. Y, una vez más, pone otra vez de manifiesto que los hombres no son tan obtusos como cierta gente (mujeres) dice que son…