Secret Files: Tunguska, guía completa - Reparación de la bomba de agua

REPARACIÓN DE LA BOMBA DE AGUAAsí, Nina vuelve a subir las escaleras y utiliza la caña para pescar ropa de invierno, así como fardos de lavandería del montacargas inferior.Una vez que ha conseguido ropa adecuada, puede abandonar la estación sin miedo a congelarse, recogiendo un cubo en su camino. Alguien está tendido en una grieta situada un poco a la izquierda de un pingüino. ¿Necesita urgentemente ayuda o ya es tarde para eso? Nina saca la señal del suelo y mete el explosivo en el agujero para desencadenar una pequeña avalancha y crear una lengua de nieve, que pueda utilizar para descender a la grieta. Desgraciadamente no puede ya hacer nada por el hombre muerto, pero al menos el diario que llevaba consigo arroja un poco de luz sobre lo que está pasando. Coge también un encendedor y un extraño amuleto.Cuando observa más de cerca, parece que el pingüino está sentado sobre algo. ¿Está empollando un huevo o puede tratarse de algo que podría ayudar a Nina? Puesto que el pingüino no parece estar dispuesto ni a hablar ni a moverse de su sitio, Nina decide atraerle con un cebo. Su primera elección es, desde luego, pescado, que podría conseguir probablemente a través de un agujero en el hielo. Desgraciadamente, sin embargo, la capa de hielo es muy sólida, lo que significa que tendrá que echar mano de un poco de sal. Remoja los fardos de lavandería en el barril de aceite de ballena y los lanza seguidamente sobre el montacargas. Puesto que está en malas condiciones, al sobrecargarlo se precipita hasta el suelo estrepitosamente. Nina transporta la pila de sal, empleando el cubo, para verterla en el agujero en el hielo.Mientras Nina espera a que la sal vaya taladrando un agujero en el hielo, regresa al baño y coge el desatascador para llevárselo al taller. Coloca el desatascador sobre la incubadora, corta el cristal que rodea el desatascador utilizando el diamante del amuleto, y saca el desatascador con el cristal pegado de la incubadora. El resultado de su hurto es un extraño huevo.Vuelve al agujero en el hielo, que se ha descongelado, con el huevo. Ata el encendedor a la caña de pescar a modo de cebo improvisado y reza para que pique algún pez. Afortunadamente tiene éxito. Inmediatamente le da el pescado al pingüino, sacando partido del breve periodo de tiempo que éste se distrae para cambiarle su extraño huevo por el huevo que cogió de la incubadora. Justo como esperaba, el huevo se convierte en un objeto muy útil, porque no sólo encaja perfectamente en la máquina que controla la bomba de agua de la Estación, sino que hace que funcione de nuevo.