La reválida de Jaël

Jaël-Sakura Bestué (Barcelona, 21 años) lleva años atesorando medallas (plata en el 200 del Mundial Sub-18 de 2017 o bronce en el 100 del Europeo Sub-20 de 2019) y récords en categorías inferiores, pero el salto natural a los certámenes absolutos le ha resultado más difícil de lo debería por trabajo y talento. El título de campeona de España de 100 metros y el fantástico desempeño del 4x100 en los Mundiales de Eugene con récord nacional y quinto puesto en la final parece haber acabado con las trabas. Ahora en Múnich disputará la prueba individual además de lógicamente el relevo. “Este campeonato quiero que me sirva de vara de medir mi capacidad a nivel absoluto internacional. Me ha costado adaptarme y estar a un nivel alto. Estos años he ido cogiendo ritmo, nivel y experiencia para competir bien en estas competiciones importantes. Así que vamos a ver aquí... (ríe)”, asegura a AS.

Eso sí, la pizpireta velocista reconoce que la parte final de la preparación no ha sido la ideal: “Estas semanas hemos estado cargando para ponerme a punto para la prueba individual y también para el relevo. Hemos trabajado muy bien y llego con muchas ganas, tanto a nivel personal porque ya hace tiempo que no hago un 100 como en la prueba de equipo. Desafortunadamente he estado tres días sin poder casi nada porque me he puesto mala y estoy un poco expectante para ver si mi cuerpo se ha recuperado bien de la semana de carga, del Mundial y de estas anginas. Espero poder dar lo máximo”. ¿Resultado satisfactorio? “No quiero ponerme expectativas muy altas, pero creo que entrar en semifinales no es difícil y una vez allí pelear por entrar en la final aunque con los días duros que llevo me hacen tener ciertas dudas sobre cómo me encontraré. Si estoy bien el objetivo es entrar entre esas ocho primeras y estar al nivel en el que he estado últimamente”.