La segunda juventud de Edge
Edge ganó el domingo su segundo Royal Rumble. Con 47 años y tras nueve años retirado por lesión sueña con ser campeón de nuevo en WrestleMania.
Corría el año 2011. Edge era una de las superestrellas más mediáticas de la WWE. Con 37 años era el campeón Mundial Pesado de la compañía. Un cetro que defendió de manera satisfactoria en WrestleMania XXVII (3 de abril de 2011). Estaba en uno de su mejores momentos, pero ocho días más tarde dejó al mundo en shock. Una lesión en su cuello, que amenazaba con dejarle en silla de ruedas para el resto de su vida, le hizo retirarse y entregar su título. Un mazazo muy duro. Siempre trabajó para volver, pero el tiempo pasaba y cada vez parecía más una quimera.
El imposible sucedió. En Royal Rumble 2020 Edge volvió a la acción. Estuvo 23 minutos y 43 segundos en el ring y las sensaciones fueron buenas. Ese día se inició un feudo con Randy Orton, que se fue cocinando las semanas posteriores, que concluyó con un combatazo en WrestleMania 36. Las dos leyendas se vaciaron y ofrecieron durante 36 minutos y 35 segundos, uno de los mejores duelos de la noche. La historia no se acabó ahí, y en Backlash hubo revancha (duró 44 minutos y 45 segundos). Orton ganó y todo apuntaba a que quedaba carrete... pero todo se truncó.
Edge sufrió una lesión en el tríceps de la que tuvo que ser operado. Ese pleito fue en junio y se esperaba una larga recuperación. Tanto fue así que se rumoreó con una retirada definitiva: su edad, una nueva dolencia... pero Edge quería volver y lo hizo el pasado domingo en Royal Rumble. En las apuestas era uno de los favoritos, pero cuando salió en el número uno de la batalla real su cotización bajó. Parecía improbable que ganase, pero de nuevo rompió los pronósticos. Tras 58 minutos y 28 segundos sobre el ring, el canadiense logró su segundo Royal Rumble (el primero, en 2010). Por si fuese poca la paliza, Edge volvió a pelear contra Randy Orton en Raw y le ganó.
Ahora, con 47 años, y tras lucir muy bien en dos combates exigentes en menos de 24 horas, el canadiense mira a WrestleMania. No es el mismo que hace diez años, pero tiene mucha experiencia y logra encender a los fans como hacía antaño. Este lunes, en Raw, no dejó claro si iría a por Drew McIntyre. De momento sabemos que este miércoles estará en NXT. Y es que 'The Rated R' tiene un contrato parcial, pero está tan encendido que parece poco probable que desaparezca antes de WrestleMania. Es su segunda juventud y tiene claro dónde quiere llevarla: ser campeón en la 'Vitrina de los Inmortales', justo donde su carrera se truncó hace casi diez años.