Orton pasa a Edge 'la factura de WrestleMania' en Backlash
Randy Orton se impuso a Edge en el combate estelar de Backlash. Un duelo que cumplió con las expectativas. Ningún campeón perdió su título esta noche.
Fueron innumerables las veces que Edge y Randy Orton intentaron la cuenta de tres del árbitro para llevarse el combate estelar de Backlash. La definitiva la consiguió Randy Orton tras un rodillazo de dudosa legalidad y una patada en la cabeza del canadiense. Contar eso es simplificar al máximo, y con el combate que ofrecieron no se debe hacer. Antes de que ocurriese, la WWE vendió el duelo como "el mejor de la historia". Es muy difícil otorgar ese calificativo, pero será recordado generación tras generación.Las dos superestrellas tienen una gran calidad y experiencia.
Además, se conocen a la perfección. Ambos ofrecieron un enfrentamiento extremadamente técnico, dejando una pieza para estudiar por todos los que vengan por detrás. Es difícil quedarse con un momento tras casi una hora de acción, y es que los dos se vaciaron. Cuando se les acabó el gas tiraron de corazón y fue el mejor momento de la noche. Solo falló el público. En el Performance Center de Orlando la WWE lleva semana metiendo personas de la compañía. Había bullicio, pero la obra de arte que firmaron merecía una arena llena. El único debe a una oda al wrestling. Orton ganó, no, lo hizo la lucha libre. Y viendo el resultado, no quedará así. Ojalá. Es el deseo de todos los fans.
El otro combate que mas llamó la atención de la noche, aunque por motivos bien distintos, fue el que enfrentó a Drew McIntyre y Bobby Lashley por el Campeonato Universal. Por el físico y estilo de los dos se esperaba un duelo igualado y así fue. Si hay que destacar el desempeño de uno, Lashley fue mejor. Eso sí, lo logró por una treta. MVP se encaró con McIntyre antes de empezar, Bobby fue por la espalda y así comenzó mandando. El aspirante maniataba al campeón siempre que quería reaccionar y tras una lanza al contragolpe rozó el triunfo. Lo tenía en su mano, era cuestión de unos momentos... pero Lana entró en escena. Le habían pedido (Lashley y MVP) que no entrase. Se subió al ring, nadie sabe para qué... y distrajo a Lashley. Eso lo aprovechó McIntyre para con un Claymore poner punto final a la pelea.
También hubo enfado en la otra pelea por el título principal, Braun Strowman mantuvo el Campeonato de la WWE ante The Miz y John Morrison. Era una lucha en desventaja y eso se notó. Miz y Morrison se conocen muy bien y lo aprovecharon. Con un ataque doble dejaron casi KO a Strowman. Morrison se puso para hacer la cuenta... pero Miz le quitó de encima. Pronto se dio cuenta de su error, pero era tarde. El 'Monstruo entre Hombres' tomó aire y pudo acabar con un triunfo. En la nómina de enfados también encontramos el de Andrade, en este caso con menos razón. Ángel Garza le salió al quite, pero Kevin Owens le noqueó. No aprovechó su oportunidad y Crews continúa siendo el campeón de los Estados Unidos. Acabó con mala cara y pensando que Zelina Vega podía haber hecho más.
Mientras, la tranquilidad continúa entre Bayley y Sasha Banks. Ambas retuvieron los Campeonatos femeninos por parejas ante Alexa Bliss & Nikki Cross y The IIconics (Peyton Royce y Billi Kay). Todo se resolvió por la rapidez de Sasha, quien logró reponerse antes de lo que todos pensaban y se aprovechó de que Alexa Bliss se había quitado de encima a Royce para hacerle un paquetito y llevase el triunfo. En el roster femenino, también Asuka retuvo el Campeonato de Raw. Lo hizo por una doble descalificación. Tras mucho sufrir, la japonesa tomó la iniciativa y castigó a Nia Jax en el ringsite. El árbitro consumió la cuenta y ambas fueron descalificadas. Por su parte, Sheamus se impuso a Jeff Hardy en un combate que dominó y The Street Profits (Angelo Dawkins y Montez Ford) y The Vikings Raiders (Erik e Ivar) no pudieron pelear, ya que antes del combate por los cinturones por parejas se enzarzaron en el parking y continuaron dentro del Perfomance Center. Todo el segmento tuvo un sentido cinematográfico-humorístico.