La UFC desvela el cartel del UFC 249 y su plan de continuidad

Tenaz. Esa es la palabra que mejor define al presidente de la UFC, Dana White. El mandamás de la compañía se resistió hasta el último momento a suspender los shows que tenía previstos en marzo y el 11 de abril debido a la pandemia de coronavirus. Al final tuvo que claudicar, pero fue claro en su objetivo. El 18 de abril, con el UFC 249, la empresa volvería a la actividad y a poco más de una semana parece que así será. Khabib Nurmagomedov se iba a enfrentar a Tony Ferguson por el Campeonato del peso ligero. Era el plato fuerte, pero no será así. El ruso está atrapado en su país por las políticas restrictivas para frenar el COVID-19 y su pleito se cayó, al igual que muchos otros.

White ha reconocido en múltiples entrevistas que cada día al levantarse "tenía un problema nuevo", pero este lunes reveló su plan, el cual parece no tener fisuras. Como se había filtrado, Justin Gaethje (apunta a rival potencial de McGregor en julio) se enfrentará a Tony Ferguson por el Campeonato Interino del peso ligero. El ganador se enfrentará al ruso. Ese combate cerrará el UFC 249, que tendrá once combates más. Por tanto, la compañía mantiene el ritmo, ya que su último PPV contó con un pleito menos.

En ese evento, White quería hacer el "mayor show" y ha cerrado combates muy interesantes. Regresa la excampeona del peso paja Rose Namajunas, quién tendrá su revancha ante la mujer que le arrebató el título, Jessica Andrade (la campeona actual es Zhang), Se recoloca el Ngannou vs Rozenstruik (previsto para el 28 de marzo) y hay nombres que siempre venden como Greg Hardy, Jeremy Stephens o Ronaldo ‘Jacaré’ Souza. Sin duda es un menú muy bueno, pero la duda sigue siendo el lugar.

En unas declaraciones en TMZ, White dio detalles de su plan magistral. El principal problema que se ha encontrado es la negativa de las Comisiones Atléticas en Estados Unidos (la de Nevada se lo impide en el Apex de Las Vegas). Al igual que el resto de gobiernos del mundo, no quieren eventos durante un tiempo. Por ello, su idea es llevar este show, y "uno cada semana durante los próximos dos meses" a una isla privada. El máximo mandatario de la UFC no apuntó cual. Todavía no la tiene cerrada al 100%, pero cuando lo haga tampoco lo dirá. Esa opción le salva los problemas legales y le permite controlar el virus. Según aseguró, todos los luchadores y personas que participen en el evento, que será obviamente sin público, viajará en un avión privado allí y serán sometido a exhaustivos controles médicos. El objetivo es que sea un búnker que le permita seguir adelante con sus planes. Dana White parece que finalmente se saldrá con la suya.