Un Movistar con todo en contra se queda sin final europea

El Movistar Inter, el campeón de las dos últimas ediciones de la UEFA Cup, no estrenará el palmarés de la ahora denominada Champions League. Fue su víctima en esos dos títulos, el Sporting de Portugal, el que le dejó sin final (5-3) en un encuentro donde los españoles no hicieron su mejor juego, pero tampoco se encontraron ningún factor a favor. Una continuación de una temporada donde ha bajado el nivel y que ahora tendrá que cumplir el enorme reto de ganar la Liga si quiere estar la campaña que viene en Europa.

El partido comenzó algo atascado, se notaba lo resbaladizo de la pista (los técnicos se habían quejado el día anterior) y con el típico respeto de una cita así. Aunque fue el Movistar quien avisaba con un disparo al palo de Ricardinho. Acción que precedió al 0-1 del equipo español, tras una jugada personal de Humberto que rebotó en Pedro Cary antes de entrar.

Pero el tanto, lejos de dar alas al Movistar, fue el inicio de una pesadilla de encuentro donde poco a poco se fue encontrando obstáculos en su camino. El primero, muy pronto, porque el Sporting sólo tardó 9 segundos en empatar con una jugada de Deo. La igualada sí motivó a los portugueses, que obligaron a Jesús Herrero a varios paradones para acabar la primera parte como el mejor de los telefónicos. Aunque antes del descanso, los árbitros no veían una clara mano del meta sportinguista, Guitta, ante Gadeia.

La segunda mitad arrancó con la misma tónica, con Herrero salvando los muebles ante Merlim y Cavinato. No pudo ya en un saque de esquina con Dieguinho, que se adelantaba a la defensa y anotaba el 2-1. El gol le hizo daño al Movistar, que encima empezaba a desesperarse con la permisividad arbitral ante la dura defensa portuguesa. Eso le pasó a Elisandro, usado por Velasco en ataque para desatascar, pero que acabó expulsado tras enzarzarse con Cardinal en una jugada trabada. La superioridad la aprovechó de nuevo Dieguinho, que anotó el 3-1 gracias a un rebote a pesar de la buena defensa de los españoles, que no tardarían en recurrir al portero-jugador.

Sin embargo, no era el día y Dieguinho firmaba su hat-trick y un 4-1 inalcanzable, a pesar de que Bebe, con la camiseta de portero-jugador, acortaba distancias (4-2). Sin embargo, esta vez la montaña que debía escalar el Movistar era demasiado alta y su nivel está lejos de ser el de sus mejores momentos, por lo que los tantos de Cardinal y de Gadeia nada más que certificaron la derrota del equipo telefónico y el final de su reinado en Europa.