Lomachenko: 'rodaje' en Los Ángeles con Commey a la vista

Vasyl Lomachenko (12-1, 9 KO) no quiere perder el tiempo. El ucraniano vivió una amplia y exitosa carrera amateur (397 peleas con sólo una derrota y doble campeón olímpico), por lo que sabe que no debe esperar demasiado en el campo rentado para que su tiempo no se pase. El profesionalismo es difícil y los cruces interesantes a veces tardan en ocurrir. Otro en su lugar, es uno de los mejores libra por libra, esperaría, pero él quiere mantenerse activo. Así se explica su pelea de este viernes en el Staples Center de Los Ángeles (recinto en el que debuta) ante Anthony Crolla (34-6-3, 13 KO).

El británico es el retador oficial WBA, pero esa vitola no le hace tener confianza alguna del público, quien le tiene muy por detrás en las apuestas (la victoria del ucraniano se llega a pagar sólo a un céntimo por euro jugado en la mayoría de casas de apuestas). Viene de tres victorias consecutivas, pero sus dos últimas grandes peleas las perdió ante Jorge Linares, quien le ganó con muchísima claridad en la segunda. Esos dos pleitos, precisamente, son los únicos que habí visto de su rival Lomachenko. "Conozco muy poco de él", reconocía en la jornada de puertas abiertas que realizó durante su preparación. Entonces, ¿por qué pelea contra él? Las opciones se le acabaron.

Lomachenko esperaba poder cerrar un pleito contra Mikey García, que era campeón WBC e IBF, pero su subida al welter para pelear contra Errol Spence cerró las puertas de ese duelo y dejaron al estadounidense sin el cinturón IBF. La otra opción que el público reclamaba era un duelo contra Gervonta Davis, pero las negociaciones con Mayweather son muy complicadas y parece complicado en el corto plazo. La tercera de sus cartas era, Richard Commey (28-2, 25 KO), quien en febrero ganó el vacante IBF del ligero, pero una lesión impidió el combate. Podía haberlo cerrado más adelante, y ahí es dónde mira Lomachenko, pero quiere estar activo y ha optado por el plan D, pero el único que le quedaba: el retador oficial.

Con todo, Lomachenko no ha querido menospreciar a un púgil batallador y que siempre va al frente como Crolla, pero ese estilo le va bien a un boxeo con tanta movilidad como el suyo y su calidad está muy por encima de la del británico. "Mi objetivo es unificar el peso ligero, y después quizá volver al superpluma para ser campeón", aseguró también en la previa. El camino es Commey, pero en el tablero de ajedrez que es el boxeo no siempre se llega a la casilla deseada por la ruta que uno quiere. Lomachenko lo sabe y disfrutará del rodeo, ante Crolla tiene una nueva opción para ratificar su puesto entre los mejores libra por libra. Necesita ganar y convencer tras ganar una dificil pelea ante Pedraza en diciembre. A por ello va.