Destino Italia

Hacia el Bernabéu con escala previa en el fútbol italiano. José Antonio Camacho tiene bien perfilados los pasos que va a dar en los próximos meses para encauzar su carrera profesional. En primer lugar, va a pasar el verano en su retiro habitual de Ibiza para desintoxicarse de la presión sufrida en este último mes y medio, que ha desembocado en su dimisión como seleccionador. Después, tiene planificado viajar por toda España y por las diferentes Ligas de postín (Inglaterra, Alemania e Italia), con el fin de recabar información de la evolución del fútbol europeo.

Su tercer objetivo pasa por hacer una incursión por el fútbol italiano. El año pasado ya tuvo una oferta muy suculenta del Milán y sabe que varios clubes transalpinos (Parma, Juventus...) le han seguido la pista, y más después del magnífico Mundial que ha protagonizado España bajo su mando. También tiene una oferta de un club español, pero con un entrenador con contrato en vigor... Una temporada en el calcio serviría para enriquecer sus conocimientos y adiestrarse en un fútbol muy competitivo, lo que elevaría su caché a poco que le fueran bien las cosas.

Mono de club

No hay que olvidar que el ex seleccionador tiene un confesado mono por entrenar en un club ("tengo inquietud por regresar al trabajo diario", confesó ayer), algo que no prueba desde que hace tres años y nueve meses dijo a Villar: "Sí, quiero". La excursión por una Liga extranjera tiene un trasfondo que afecta directamente al equipo de su corazón, el Real Madrid.

Camacho tiene pendiente de aprobar esa asignatura pendiente, pero para los malintencionados quiso dejar claro que no piensa hacer la cama a nadie: "Del Bosque es mi amigo, mi hermano, y no estoy en esa onda de ponerme mano a mano a trabajar con Valdano".

La cuestión es sencilla. Del Bosque finaliza su contrato con el Real Madrid el próximo 30 de junio y su intención inicial es dejar el banquillo para recuperar su trabajo con la cantera y asentarse en un plano más alejado de la presión diaria del primer equipo. Una vez que la plaza de entrenador quedase libre, Florentino Pérez y Jorge Valdano tendrían las manos limpias para poder negociar con Camacho, que jamás escuchará oferta alguna mientras que Del Bosque sea el entrenador del Real Madrid. No hay que olvidar que Florentino pensó en Camacho nada más llegar a la presidencia, el 17 de julio del año 2000. Toca esperar.