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Real Valladolid y Cruzeiro intercambian conocimientos

Álvaro Panedas, nuevo responsable del Promesas, pasó diez días en Belo Horizonte compartiendo inquietudes con técnicos de A Raposa.

Álvaro Panedas, junto al responsable de Cruzeiro de las categorías sub'20.

A Real Valladolid y Cruzeiro les une desde hace tiempo no solo la propiedad, en la figura de Ronaldo Nazário, sino también el intento de implementar una filosofía con unos patrones de juego similares, aunque adecuados al contexto en el que ambos compiten. Además del trasvase de jugadores como Breno Teixeira o Paulo Vitor, que han vestido los colores de los dos clubes, así como de directivos como Enrico Ambrogini, Gabriel Lima o Paulo André Cren, director de la estrategia deportiva de ambas entidades, comparten también conocimientos a través de procesos como el que protagonizó Javier Torres Gómez en marzo del pasado año o, en fechas recientes, Álvaro Panedas, nuevo responsable del Real Valladolid Promesas (junto a Diego López, director de cantera).

Los diez días que el integrante de la dirección de las categorías inferiores pasó en Belo Horizonte sirvieron como una experiencia integral de intercambio, por ejemplo, de metodología y protocolos de actuación, desde el modus operandi de unos y otros en los entrenamientos, cuya base tiende a ser diferente por la distinta tipología del jugador (más vertical en Brasil y de mayor pausa en España), hasta la gestión de las ciudades deportivas; dos, en el caso de la entidad brasilera, que tiene dos instalaciones, Toca I y Toca II, en Belo Horizonte, pasando por la forma en que cada uno de los dos clubes estructura el trabajo que lleva a cabo en la cantera.

No en vano, la dimensión de Cruzeiro, que pasa por ser uno de los clubes más grandes de Brasil, a pesar de su reciente experiencia en la segunda categoría nacional, sirve como modelo ‘importable’ del que trasladar ideas, mientras que el mayor desarrollo que existe en nuestro fútbol del trabajo metodológico, que en el caso del Real Valladolid ha favorecido el incremento de internacionales en categorías inferiores, mediante el concepto ‘exportable’ de un control del juego a través de los procesos de entrenamiento, puede valer para la mejora de una entidad mayor en estructura como es ‘A Raposa’, entre otros aspectos de los que han podido beber los participantes en esta experiencia.