El dilema de Nacho Méndez

Asier Garitano confesó en una de las últimas ruedas de prensa de la temporada que no se atrevía a decir que Nacho Méndez no seguirá en el Sporting. El luanquín recibió a principios de año una oferta de renovación, a la que aún no ha respondido sencillamente porque no ha aceptado las condiciones planteadas.

El Sporting no ha dado carpetazo a este asunto y la continuidad de Nacho Méndez sigue en el aire. De hecho, en los próximos días está previsto reactivar una negociación que en aquel primer momento no llegó a avanzar.

“Ha mostrado gran carácter en los partidos que he estado aquí; es un jugador de alto nivel”, declaró Garitano sobre el canterano al que considera una pieza importante tanto en el equipo como en su vestuario. El centrocampista fue el jugador de campo con más minutos en la temporada y fue titular en seis de los ocho partidos con el técnico vasco en el banquillo, disputando completos cinco de ellos.

Nacho Méndez quiere ver reconocido en su contrato el estatus relevante que ha ido alcanzando en los últimos años, tanto con Ramírez como con Albés y Garitano. El problema que tiene el canterano rojiblanco (lleva en Mareo desde los 12 años) es el dilema al que se enfrenta con las propuestas que, según su entorno, tiene sobre la mesa. El luanquín tendrá que elegir entre el nuevo planteamiento que le haga el Sporting y ofertas de diferentes clubes españoles o alguna concreta del extranjero.

Las Palmas, Leganés y Deportivo han aparecido entre los equipos de Segunda que se han interesado por su situación. En el Alavés tendría la posibilidad de jugar en Primera si se concretase una oferta. Mientras que del extranjero ha aparecido con fuerza en las últimas horas el nombre del Johor, equipo de la Superliga de Malasia donde juegan otros ex sportinguistas como Juan Muñiz o Roque Mesa.

La próxima semana se antoja crucial para el futuro de Nacho Méndez que la pasada semana se dirigió a la afición a través de una carta en las redes sociales. Fueron líneas sobre todo de agradecimiento sin llegar a reflejar una despedida, aunque el pasaje más enigmático fue el siguiente: “Se ha cumplido otro de los sueños de ese niño que llegó hace dieciséis años a Mareo, el de ponerse el brazalete de capitán del equipo de su vida. A ese niño de once años solo le queda un sueño por cumplir”. Ese sueño se puede pensar en que no es otro que jugar en Primera, pero la pregunta es si lo seguirá buscando en el Sporting o lo cumplirá fuera de Asturias.

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