Xabi vuelve al templo
El tolosarra regresa a Anfield, al que llegó con 22 años y donde jugó cinco temporadas. El Liverpool está en crisis a pesar de gastar 482 millones en fichajes.
Podría decirse que Xabi se hizo un hombre en Anfield. Allí llegó con 22 añitos, producto de Zubieta e hijo de Perico Alonso, mito de la Real campeona de Liga. Ya era un jugador contrastado, porque fue uno de esos talentos que explotan aún imberbes. Pero si llegó al Liverpool con 123 partidos en la élite en sus piernas, lo que vino después le colocó por derecho propio en la historia del fútbol. Allí, en Anfield, llegó a disputar 210 partidos y, más allá de la FA Cup y la Community Shield ganadas a nivel local, llegó a jugar dos finales de Champions, ambas, ante el Milan de Ancelotti. Ganó en 2005 la primera. Una remontada histórica en la que él firmó el 3-3 definitivo, fallando un penalti y marcando luego el rechace para forzar los penaltis. Y perdió la de 2007.
Xabi Alonso vuelve hoy al templo en el que fue un pilar básico para el Spanish Liverpool que comandó Rafa Benítez y donde coincidió con Reina, Arbeloa, Luis García, Antonio Núñez, Josemi, Morientes o Fernando Torres en diferentes épocas. Agigantar su figura en Anfield le valió para que Florentino Pérez apostara por él cuando volvió a la presidencia del Madrid en 2009. Su fichaje fue difícil. Xabi tuvo que pedir el Transfer Request y el Madrid esperar hasta el último momento del mercado y filtrar que iba a fichar finalmente al belga Defour para ese puesto, para desatascar la situación y que Xabi también pudiera hacer historia en el Madrid. Y hoy el tolosarra cierra el círculo volviendo a Anfield.
Descubre qué futbolistas jugaron en el Liverpool y en el Real Madrid
Xabi nunca se ha enfrentado en Anfield al Liverpool como jugador, pero sí lo visitó como técnico del Leverkusen en noviembre de 2024. Se llevó cuatro goles de vuelta en una noche mágica de Luis Díaz, que hizo un hat-trick. Pero aquel Bayer era un equipo de autor, un milagro que Xabi hizo realidad. Hoy, en cambio, llega a los mandos del mayor transatlántico del fútbol mundial, un Real Madrid con el que, además, ha completado un arranque de temporada de leyenda, igualando los dos mejores anteriores del club en sus 126 años de historia (sigue el partido en directo en AS.com).
Este Liverpool da menos miedo que el que ganó la Premier la pasada temporada a pesar de haber gastado 482 millones de euros en fichajes. Ha tirado la casa por la ventana por jugadores como Isak (145 millones), Wirtz (125) o Ekitike (95). Pero así es el fútbol. Los de Slot, al menos, se reencontraron con la victoria ante el Newcastle en la última jornada antes de recibir al Madrid, parando una sangría de seis derrotas en los últimos siete partidos y comenzando a ver algún brote verde con la subida de rendimiento de Salah y los motores del equipo, Gravenberch y Mac Allister. Pero los fichajes pagados a precio de oro no están funcionando. Wirtz no termina de encontrarse en el ritmo alto de la Premier e Isak no está bien físicamente, y sólo ha podido marcar un gol en ocho partidos. Hoy Isak, como Frimpong y Allison, es baja por lesión. Con todo, teniendo tanto buen jugador y el imponente ambiente de Anfield de su lado, los blancos tienen ante sí un Everest, la tercera gran prueba de fuego tras las vividas ante Atlético y Barcelona.
Se pueden ver pocos partidos de fútbol mejores que el de hoy. Entre Madrid (15) y Liverpool (6) juntan 21 Copas de Europa ganadas y 28 finales disputadas (18 y 10) sobre el césped. Ambos han jugado dos finales recientes, las dos ganadas por el Madrid: la de 2018 (3-1) recordada por la jugada entre Ramos y Salah, y la de 2022, por el gol de Vinicius a pase de Valverde desde esa banda derecha de la que ahora parece renegar el uruguayo. Y hubo otra más, en 1981, esta cayó del lado red ante el Madrid de los García.
En el Madrid es baja de última hora Mastantuono por la misma pubalgia que sufre Lamine Yamal. Güler está totalmente recuperado de la torcedura de tobillo que sufrió ante el Valencia y será titular, como Camavinga. Contando con que Valverde volverá a jugar en el lateral (Trent, que también vuelve a la que fue su casa durante 20 años, aún no ha jugado tras el alta médica) sólo resta saber cómo ordenará Xabi las fichas en la parte de arriba. A priori, tiene dos opciones, un 4-2-3-1 con Güler junto a Tchouameni y Camavinga en el costado derecho (Bellingham por detrás de Mbappé) o cambiar al 4-3-3 y poner a Güler a la derecha en la línea de los tres de arriba junto a Vini y Mbappé, respaldados por el trivote Camavinga, Tchouameni, Bellingham. Esta opción obligaría a Jude a partir desde la izquierda.
Hasta el momento, Xabi Alonso ha demostrado ser un buen arquitecto para este Real Madrid en el que se comienza a atisbar, por primera vez desde que coinciden en el Madrid, la mejor versión simultánea de sus tres jugadores franquicia: Mbappé (16 goles), Bellingham (tres partidos seguidos marcando) y Vinicius (él, eso sí, con muchas turbulencias pero con ganas de desmotar).
Noticias relacionadas
“Por supuesto que tengo ese sueño de entrenar al Liverpool, claro. Primero me tengo que probar y prepararme, pero si decido en algún momento ser entrenador, está claro que mi compromiso y mi pasión con el Liverpool están ahí... ¿por qué no? Tendremos que ver si nuestros caminos se cruzan”, dijo Xabi en Talk Sport tras colgar las botas. Otro sueño, este aún mayor, el de entrenar al Madrid, le ha llegado primero. Xabi vuelve hoy al templo, otra vez, instalado en la cima.
¡Tus opiniones importan! Comenta en los artículos y suscríbete gratis a nuestra newsletter y a las alertas informativas en la App o el canal de WhatsApp. ¿Buscas licenciar contenido? Haz clic aquí
Rellene su nombre y apellidos para comentar