Alaba es intocable
A pesar de la incertidumbre que hay tras el fichaje de Rüdiger (29), el central madridista no quiere perder su sitio en el once titular.
Alaba (30 años) ha empezado la temporada tal y como terminó la pasada: consiguiendo títulos con el Real Madrid en el eje central de la zaga. El líder de la defensa blanca cuajó un gran partido en la final de la Supercopa de Europa ante el Eintracht donde, además, consiguió abrir la lata para poder alzarse con el título de supercampeón ante el club alemán (2-0). Según Olocip, en el partido entre los campeones europeos, el austriaco consiguió un valor de 0,62 con todas sus acciones totales dentro el terreno de juego y solo fue superado por Benzema (0,75).
A pesar de la incertidumbre que hay tras el fichaje de Rüdiger (29) por un puesto en el once titular, la teoría que manejaban en el club era que el alemán jugaría de central junto a Militao (24), devolviendo a Alaba a la posición de lateral izquierdo (en el Madrid ha disputado solo cuatro encuentros como ‘3′), en la que jugó tantos años con el Bayern. Pero Ancelotti no ha terminado de ver bien ese camino, de momento, y así lo ha demostrado en la pretemporada. Tanto que, ante el Barça en Las Vegas, Rüdiger fue titular como lateral izquierdo y se postula para la misma posición en el debut liguero ante el Almería (domingo, 22:00).
Jefe de la defensa
David, que llegó el curso pasado a la disciplina blanca, no tardó en adaptarse al club merengue. Terminó la temporada como titular indiscutible y con 4.069 minutos disputados, siendo el cuarto futbolista más utilizado por Ancelotti tras Courtois (4.560′), Militao (4.496′) y Vinicius (4.274′). Según la IA, defensivamente alcanzó un valor de 0,10 con sus acciones en la zaga blanca y que, durante el curso que entra, se incrementará: llegará hasta el 0,11, aumentando las intercepciones hasta el 0,04 y recuperaciones hasta 0,02 por cada 90 minutos jugados.
Además, el austriaco tiene una faceta que pocos defensas tienen, la goleadora. En 47 partidos con el club blanco, se ha convertido con cuatro tantos en el defensa con más goles de la plantilla merengue (todos fuera de casa: Eintracht, Osasuna, Sheriff y Barça), y ha realizado cuatro asistencias. El colofón a su brillante campaña llegó en forma de títulos: sumó Liga, Champions y Supercopa de España, y dejó una imagen icónica para el recuerdo, la famosa silla tras la remontada ante el PSG. Tras la consecución de la Supercopa de Europa ante el Eintracht y con 4.159 minutos a su espalda, el jefe de la defensa del Rey de Europa consigue un título cada 11 partidos. Unos números que disfrutan en el Paseo de la Castellana...