El 11 del gol en el Girona

Si los goles son amores, en el Girona pueden presumir de tener cariño. El conjunto rojiblanco es, tras Almería (41) y Eibar (40), el tercer equipo más anotador de Segunda con 36 y Míchel puede estar feliz de contar con una plantilla que demuestra ser aplicada. El técnico instó al grupo antes de recibir a la Ponferradina que necesitaba que más jugadores aportaran en la faceta ofensiva y el equipo ganó sin la necesidad de que su pichichi Stuani marcara. Es más, en Liga, Míchel podría completar un 11 con sus goleadores.

Tener repartido el gol es fundamental en una Liga tan larga como la Segunda y en la que los jugadores viven rachas diferentes. Hasta 11 jugadores rojiblancos saben este curso qué es marcar en Liga y el último en sumarse fue David Juncà, que hizo el 3-0 ante la Ponferradina. Excepto la portería, desde todas las líneas del terreno de juego se han aportado gol este curso. Stuani es, sin duda, el máximo anotador con 15 tantos y le sigue Nahuel Bustos, con cinco. Entre los dos han firmado el 55 por ciento de los goles esta campaña y de ahí que Míchel lanzase un órdago al resto de sus jugadores para que diesen un paso adelante. Además de Juncà, Samu Saiz y Juanpe lo dieron la pasada jornada contra la Ponferradina y es que ellos redondearon la victoria con sus tantos. Los defensas están aportando de manera considerable en ataque porque si Juanpe suma dos tantos en Liga este año, Bernardo puede presumir de lo mismo y Santi Bueno también ha festejado un tanto esta temporada.

Futbolistas como Álex Baena, que lleva tres tantos, Samu Saiz, dos, y Pablo Moreno, uno, son conscientes que podrían aportar más pegada y Míchel está en ello. El entrenador les ha pedido dar un plus en este aspecto y sus estados de forma actuales permiten ser optimistas. Después está la otra cara de la moneda porque jugadores como Aleix y Borja García aún no saben qué es marcar en Liga. El mediocentro de Ulldecona sí marcó en Copa del Rey, pero en la competición liguera se le está resistiendo. Esta jornada, contra el Valladolid, se espera que regrese a los terrenos de juego tras dos semanas de baja por lesión, y es un jugador con infinidad de recursos y un gran golpeo de balón. Como asistente ya está aportando, pero también se le pide gol. Como al recién llegado Iván Martín. En su presentación advirtió que la pegada no era una de sus mayores virtudes, pero en Girona debería mejorar este aspecto. Se espera mucho de él y se le firmó para ser diferencial y ayudar en la consecución del objetivo del ascenso a Primera.