El juego del gato y el ratón
Luis García Plaza y Vicente Moreno, Mallorca y Espanyol, concentran su rivalidad del último año y medio a un solo partido, una eliminatoria copera. Sin Maffeo, con Diego López y Darder.
Arrastran Mallorca y Espanyol una rivalidad mucho más histórica de lo que parece. Que empezó en 1932, precisamente en la Copa de España, con la nomenclatura actual del club balear recién estrenada y una eliminatoria que tuvo que suspenderse al descanso por agresión al árbitro. El monstruo dormido ha ido abriendo un ojo a lo largo de las décadas –las dramáticas promociones de 1963 y 1989, el enfado de N’Kono con Etoo en 2004 a cuenta de una remontada…– hasta despertar de nuevo la pasada temporada en Segunda. Enemigos íntimos que se reencuentran en un partido a cara o cruz (sigue el encuentro en directo en As.com).
Como el gato y al ratón llevan año y medio Luis García Plaza y Vicente Moreno, su antecesor en el banquillo bermellón, jugándose un ascenso que ambos consiguieron finalmente, lanzándose pullas en las salas de prensa, evitándose incluso sobre el césped, con saludos furtivos y, en definitiva, compitiendo. De esos enfrentamientos salió el Espanyol vencedor el pasado 14 de febrero (1-2), y el Mallorca reforzado en agosto (1-0), ambos en Son Moix. Pero siempre hubo reválida. Ahora, en la Copa, solo uno pasará a cuartos. El otro caerá.
Por si hubiera poco morbo, tanto bermellones como pericos vienen de sufrir derrotas que no entraban en sus planes, ante Levante (2-0) y Elche (1-2), respectivamente, por lo que otro traspié puede trastocar la confianza en una temporada hasta ahora tranquila, si bien en el caso del Mallorca cada vez más cerca de la zona peligrosa en LaLiga.
Dos expericos protagonizan –junto a Baba, en la Copa de África– las principales bajas bermellonas, Raillo porque no vuelve a tiempo y Maffeo porque cae, desprotegiendo el lateral diestro de un equipo que pierde a otros dos jugadores por la COVID-19.
Una enfermedad que también puede condicionar, como viene sucediendo en las últimas semanas, un once perico al que puede regresar un mallorquín, Darder, y donde la gran incertidumbre se sitúa en la portería. Joan García, titular en las dos primeras eliminatorias, deshoja la margarita con Diego López, héroe en Ponferrada pero ausente en LaLiga el pasado lunes por razones médicas. La distancia entre una victoria y una derrota. Entre los cuartos y la nada.