El Tenerife suele empezar bien la Copa

El Tenerife vuelve a participar en la Copa del Rey un evento que, históricamente, suele empezar con buen pie. A pesar de que en los tiempos recientes las estadísticas digan lo contrario, en 40 de las 63 intervenciones blanquiazules en este torneo se pasó a la siguiente ronda. En los 23 restantes se quedó eliminado a las primeras de cambio.

En los últimos dos cursos, por ejemplo, se avanzó bastante. En el pasado, tras eliminar al Sestao River y Castellón, se perdió en el Heliodoro ante el Villarreal en el minuto 89. Y en la anterior, después de superar al Mensajero, Rayo Majadahonda y Valladolid, fue el Athletic Club quien, en octavos de final y por penaltis, eliminó a los pupilos de Rubén Baraja tras igualar 3-3.

La última vez que se quedó fuera en su estreno fue en 2018, perdiendo contra el Cádiz en casa (1-2). Ese resultado confirmó, en cierta medida, el andar del equipo por este evento a partir del año 2000 ya que los sinsabores se fueron repitiendo. Por ejemplo, entre el 2009 y el 2015 el Tenerife quedó eliminado nada más empezar y en algunos casos ante equipos de inferior categoría como el Cerceda o el Alcoyano.

Sin embargo, a lo largo de los años, los números reflejan lo contrario. Si bien quedó apeado enseguida en sus primeras tres participaciones (1932, 1933 y 1939), lo más normal era que el cuadro blanquiazul avanzara al menos hasta la segunda ronda.

Su mejor participación fue la de la temporada 1993/1994 cuando los de Jorge Valdano accedieron hasta las semifinales, donde les frenó en seco el Celta de Vigo (3-0 en Balaídos y 2-2 en el Heliodoro). En aquella campaña se había dejado en el camino al Valencia (3-1 y 3-2) y al Real Madrid (2-1 y 0-3). Algunas décadas antes, en el curso 75-76, los insulares llegaron lejos, pero se quedaron en cuartos de final, tras perder la eliminatoria con el Real Zaragoza.