Ni mereciéndolo, Fuenlabrada y Mirandés saben ganar

Nadie sale de pobres con este empate entre Fuenlabrada y Mirandés. Los de Oltra firman minutos sensacionales y, luego, se 'pegan tiros en el pie' como la expulsión de Ibán en el 30'. El Mirandés, por su parte, puso en juego su mucho talento pero también su poca capacidad de ganar al sólo conseguir derribar el muro azulón en el 84'.

Dijo Oltra en rueda de prensa que "sus jugadores eran conscientes de la situación que vivía el equipo" y sus primeros minutos dieron credibilidad a las palabras del técnico. Los del valenciano llevaron el papel protagonista desde el minuto uno e intentaron, sin demasiado acierto al principio, poner en peligro a Lizoain.

Sucede que cuando el Fuenlabrada aprieta, recupera todo lo que ha perdido en este fatídico mes: la fuerza, la velocidad, el toque y hasta el gol. En el minuto 8, Pedro León, que andaba desaparecido las últimas jornadas, soltó un cañonazo desde el vértice del área que entraba por la escuadra contraria ante la mirada del cancerbero jabato. Algarabía en el feudo kiriko para calentar una noche fría y complicada.

El tanto asentó el duelo y dio a cada uno su papel. El Fuenlabrada cedió el balón, pero lo hizo con la tranquilidad de saber que replegado y saliendo con velocidad tendría el partido en su sitio. Los de Lolo Escobar, por su parte, buscaban en el talento de Riquelme igualar el marcador. Con esa situación de partido, todo el peligro lo llevaban los locales. Pedro León intentó el gol olímpico y si no llega a ser por Lizoain, la grada del Torres se hubiese puesto a sus pies. Poco después, Cristóbal fue demasiado solidario al no buscar el tanto y ceder a Juanma. El canterano Dago también tuvo la suya.

Sin embargo, las alegrías duran poco en la casa del pobre. En el minuto 30, Ibán Salvador veía su segunda amarilla al cometer una dura falta sobre Brugué. La primera, cómo no cuando se trata del seis azulón, fue por protestar. Media hora le bastó al mediapunta ecuatoguineano para mostrar todo su fútbol, que es mucho y de Primera, y media hora le bastó para mostrar su temple y cabeza, que es poca y de Tercera, sobre el verde.

El Mirandés no lo dudó a la hora de volcarse hacia la portería de Altube. Viéndose con uno más, los visitantes fueron cercando el gol a través de los muchos cedidos de Primera en sus filas: Camello, el ya mencionado Riquelme, Brugué... Sobrevivió el Fuenlabrada a los 15 minutos de asedio gracias a una grada que apretó y un Mbia inconmensurable.

La segunda parte trajo cambios en ambos equipos. Oltra, temiendo el empuje de los visitantes, blindó a su equipo con una defensa de cinco. Lolo puso todavía más mordiente con la entrada de Gelabert. Con el balón ya en juego, la inferioridad numérica de los locales quedó nivelada por su ímpetu inicial, que puso el miedo en las piernas de los de Anduva.

Poco a poco, el Mirandés fue encontrando los pasillos hacia la portería de Altube, pero sin éxito para sus intereses. Cerca estuvo Galech Apezteguía de sembrar el pánico en el Torres al señalar un penalti a Iribas que el VAR corregió al entender con buen criterio que la mano estaba pegada al cuerpo y no era sancionable.

Sin embargo, la caza del empate por parte de los visitantes no había hecho más que empezar. Altube tuvo que sacar una magistral mano para salvar a los suyos, pero eso sólo era el comienzo...Todo le sale mal al Fuenlabrada en los últimos meses, cuando los locales volvían a tomar el pulso al partido, Brugué ponía las tablas en el 84' y no fue más porque el cancerbero azulón no quiso con dos grandes paradas.