Hoy habla Mbappé

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Un día Bélgica miraba a Francia con nostalgia, casi admiración. Era su vecino, al mismo tiempo su espejo inalcanzable. Especialmente en el fútbol. Los 11 millones de belgas no podían acercarse a los 70 de franceses. Ni en número, ni tampoco en talento. Pero todo aquello cambió.

Bélgica pasó del puesto 68 del ránking FIFA al 1 que ocupa desde hace ya tres años. De repente, los rivales invisibles comenzaron a desafiar a los grandes favoritos, especialmente tras la llegada de Roberto Martínez. Mientras, los franceses siguieron a lo suyo, incluso fueron campeones del mundo en 2018. Por el camino dejaron, precisamente, a los belgas. Fue en semifinales. Aquel partido aún lo recuerdan con dolor los Diablos Rojos.

Ese mismo duelo se reproduce ahora en semifinales de la Nations League, en la fría Turín (sigue el partido en directo en As.com). Es cierto que ambos vienen de patinazos importantes en la Eurocopa. Francia abusó de soberbia ante Suiza, en octavos, muy pronto; A Bélgica se la llevó por delante la futura campeona Italia, en cuartos. Pronto también.

Sus selecciones se mantienen casi intactas desde entonces. Eso sí, Francia tendrá la durísima baja de Kanté en mediocampo. "Tiene seis pulmones y treinta y seis piernas", dijo el belga Witsel, quien hoy respirará más tranquilo en su zona sin el mediocentro del Chelsea.

Las semifinales también sirven para poner sobre la mesa dos nombres que suscitan emociones distintas entre la afición madridista. Por una parte la gacela Mbappé, cuya semana de entrevistas se considera la declaración de amor definitiva hacia el Madrid. El otro personaje del partido, casi inédito esta vez, es Hazard. Su técnico en la selección es ya uno de los pocos que confía en él tras su calvario con las lesiones.

No es un Mundial. No es una Eurocopa. Pero es una Nations League de lujo con las mejores estrellas de Europa. Es aquí donde mejor saben hablar. En el césped, su territorio.