Muñiz Fernández: "La Primera RFEF va a exigir muchísimo"
El exárbitro, que ahora ejerce como director general del Talavera, analiza en AS la nueva categoría de bronce y las aspiraciones del equipo blanquiazul.
Han pasado siete años desde que César Muñiz Fernández (Bruselas, Bélgica, 18-5-1970) colgara el silbato, tras 14 temporadas y 252 partidos dirigidos en Primera, el quinto colegiado con más encuentros en la máxima categoría. Ahora afronta su segunda campaña como director general del CF Talavera, uno de los 40 clubes que este fin de semana inician su andadura en la temporada inaugural de la Primera RFEF, el nuevo tercer escalón del fútbol nacional. En una mañana, la de este pasado jueves, donde la actividad en El Prado es intensa para seguir ultimando detalles, Muñiz atiende a AS en el estadio blanquiazul para hablar de su experiencia en la entidad blanquiazul y el desafío, deportivo y económico, que supone competir en la nueva categoría que echa a andar.
—No es común ver a un exárbitro en los despachos. ¿Cómo llega Muñiz Fernández al Talavera?
—Después de 18 años de fútbol profesional entre Primera y Segunda División, me apetecía el poder estar en el fútbol no profesional. Pasé por ahí como árbitro y al final es un reto. Hemos llegado aquí a través de unos amigos que conocían Talavera. Es una ciudad muy futbolera, con un equipo que estaba limitado económicamente. Con la idea de que no desapareciera quisimos aportar nuestra experiencia y nuestro conocimiento e intentar reflotar el equipo y llevarlo al fútbol profesional. A nivel arbitral tuve el reto de llegar a ser internacional y lo conseguí y otro reto importante para mí es lograr dar la vuelta a este club, conseguir objetivos a corto y medio plazo y poder ser un poco como el Eibar, el Leganés, el Getafe, el Huesca... Llegar a Segunda División y, por qué no, un día a Primera.
—Hablando de retos, su primer año ha sido un verdadero desafío. Llegada al club, la reestructuración de la competición, la covid...
—Somos unos privilegiados. Hay que decirlo en voz alta, para que la gente sea consciente de dónde estamos y lo que hemos hecho. Este club, que corría el riesgo de desaparecer e iba a tener muchos problemas económicos, consigue ascender en el mismo año a la Primera RFEF, cuando hay equipos con gran potencial, como Marbella, Recreativo o Córdoba, que están en categorías por debajo de nosotros. Hay que mirarse el ombligo y reconocer el extraordinario trabajo que se ha hecho para estar en esta categoría. A partir de ahora, seguir en la línea de lo que hemos hecho bien, retocar lo que hemos hecho mal e intentar mejorar en todas las áreas del club.
—¿Cómo afrontan, en lo deportivo, lo económico y lo institucional, el debut en la nueva Primera RFEF?
—Es una categoría muy bonita y atractiva para todo el mundo y que exige muchísimo. Competir en esta categoría es todo mucho más caro: viajes, fichas, arbitrajes... Todos los gastos son muy superiores. También a los futbolistas, para tener una plantilla de calidad, tienes que pagarles mucho más. Luego los ingresos nos gustaría que fueran mucho más, pero vamos a andar ahí. Para equipos modestos como nosotros, que no tenemos una masa social como la del Dépor de 20.000 abonados o la del Racing, no va a resultar fácil. Tenemos un campo de 4.500 espectadores, vamos por 1.800 socios y tenemos que luchar contra esas armas. Lo vamos a pasar mal en ese aspecto. Desde aquí nos dirigimos a la ciudad, Ayuntamiento, instituciones, socios, empresarios... El tren está en esta estación y tenemos que subirnos a él. Si no aprovechamos este momento, igual tardamos muchos años en volver a esta categoría. Todo es poco para cubrir el presupuesto. Armar una plantilla competitiva para luchar de tú a tú con los grandes requiere de más apoyo.
—Aparte de los gastos, ¿en qué más han notado el impacto de pasar de Segunda B a Primera RFEF?
—Por parte de la Federación cada vez hay más exigencias. El objetivo de la RFEF es que los clubes que intenten llegar a Segunda División noten menos el salto abismal que había de Segunda B a Segunda A. Por eso la Federación está haciendo mucho hincapié en todas esas reformas, para que el club que llegue arriba note menos los cambios y se adapte mucho mejor al fútbol profesional.
"Si dejamos pasar el tren, pueden pasar muchos años hasta que volvamos a esta categoría"
—¿Están satisfechos con las cantidades por los derechos de televisión?
—Las expectativas que teníamos todos los clubes eran diferentes. Siempre pensamos que iba a haber mucho más dinero. Al final no ha sido ni tanto como esperábamos ni tan poco como luego nos decían, sino un término medio. Tenemos que adaptarnos con lo que hay, ya no sirve de nada el pataleo. Hay que mirar hacia adelante. Como decía antes, no va a ser fácil para equipos modestos como nosotros. Habrá que buscar recursos económicos, acciones comerciales para generar ingresos para mantener esta plantilla y este nivel si queremos competir por algo en condiciones y mirar a cotas mayores.
—¿Está satisfecho con la campaña de socios?
—Llevo año y medio aquí y siempre me han dicho que en Talavera cuesta mucho. Yo esperaba tener 3.000 socios por lo menos, porque es una oportunidad única. Estar en Primera RFEF, ver al Deportivo, al Racing de Santander, al de Ferrol, a la UD Logroñés... Pensaba que la gente iba a volcarse mucho más. Esperamos hacer un buen partido el domingo en Badajoz, dar un último arreón, que la gente se anime y poder llegar a esos 3.000. El calor de la afición es muy importante para hacer de nuestro estadio un fortín.
—¿Cómo valora la plantilla?
—Tenemos una plantilla compensada, con dos futbolistas por puesto. Tener banquillo te da una garantía. Sabemos que esta liga va a ser complicada, difícil, larga. Quien tenga más banquillo y más regularidad lo va a notar.
—¿Cuál es el objetivo del CF Talavera para esta temporada?
—El primer objetivo es mantenerse. Somos un equipo modesto, con pocos socios, en una ciudad pequeña, y no podemos aspirar a más. Pero confío mucho en esta plantilla y en este equipo. Yo creo que nos va a sorprender. La competición nos dirá dónde estamos: el octavo, el decimoquinto o el tercero. Pero yo creo que en esta plantilla, que mantiene el bloque del año pasado, hay muy bien ambiente y saben a lo que juegan, nos van a dar muchas alegrías. Aparte, por supuesto, de la permanencia, yo creo que podemos estar entre los diez primeros.
"Si quieres crecer, tienes que ser sociedad anónima deportiva"
—El club, para crecer, decidió convertirse en SAD. ¿Cómo va ese proceso?
—La mayoría de los clubes deportivos están afrontando ese proceso, porque si quieres crecer tienes que ser sociedad anónima deportiva. El expediente está en el Consejo Superior de Deportes y yo confío en que en septiembre podamos dar ya el carpetazo final. Ser SAD es la manera de tener compañeros de viaje que vean que este proyecto deportivo puede ser sostenible y que puedan entrar empresas para fortalecer mucho más este club y poder llegar a cotas más altas.
—¿Cómo puede afrontar un club que no sea SAD las exigencias de la Primera RFEF?
—Poniendo dinero de tu bolsillo. De la Segunda División para abajo estás constantemente poniendo dinero de tu bolsillo. Siendo un club deportivo es complicado, porque nunca sabes si lo vas a recuperar o no. Siendo una SAD es diferente. La ciudad debe ser consciente del esfuerzo que estamos haciendo, que estamos apostando deportiva y económicamente por este club y poniendo dinero. Se debe valorar que estamos poniéndolo todo por intentar conseguir la permanencia en Primera RFEF, mejorar las estructuras y que podamos llegar algún día al fútbol profesional.
"Aunque seamos humildes, no vamos a dejar de ser ambiciosos"
—¿Cuál es el horizonte del CF Talavera a medio y largo plazo?
—Hay que ser modestos y humildes. A mí no me gusta vender humo. Estamos en la Primera RFEF y vamos a disfrutarla. Pero no por el hecho de que seamos humildes vamos a dejar de ser ambiciosos. Queremos mirar arriba, pero sabemos que no podemos pasar del 0 al 10 sólo por el 8. Tenemos que pasar por el 2, por el 3... Estamos ahora en el 4, construyendo, con la mira y el objetivo de poder llegar algún día al fútbol profesional, pero al mismo tiempo con los pies en el suelo y con humildad. Si entre todos somos capaces de sumar y apoyar a este club, podemos conseguirlo.
—Usted que ha arbitrado por toda España, ahora le toca visitar como dirigente grandes campos en los que pitó...
—Me va a traer buenos recuerdos cuando vaya a Riazor, a El Sardinero a Las Gaunas... Son campos míticos en los que he arbitrado muchas veces en Segunda B, en Segunda y en Primera. Mantengo amigos entre directivos y delegados que permanecen en esos clubes. Va a ser un motivo de felicidad. Poder llevar al Talavera por esos campos y recordar con viejos amigos momentos que compartimos en el césped.
—¿Desde el palco se empatiza con el árbitro?
—Es un rol diferente. En la vida, si dejas una buena estela, al final dejas amigos. En una carrera arbitral de más de 300 partidos no puedes dejarlos a todos contentos
—El Talavera tiene en la plantilla a un jugador, Rubén Miño, al que ha arbitrado...
—Ahora coincidimos en la misma aventura. Él está feliz de estar aquí con nosotros, ver que la plantilla que tenemos es una familia y que podemos hacer cosas grandes. Si la gente está contenta, ilusionada y feliz, se pueden hacer muchas cosas.
"Gestionar con el dinero de Primera y Segunda es fácil; lo difícil está aquí"
—Ahora los árbitros cuando se retiran se van al VAR, ¿le hubiera gustado desarrollar esa faceta?
—No, sinceramente. Cuando dejé de arbitrar yo me desvinculé completamente de la Federación. Intenté seguir mi camino de otra manera y ahora con este reto de poder llegar al fútbol profesional, que con un club más modesto la satisfacción es mayor. En Primera o Segunda manejas mucho dinero y es muy fácil, entre comillas, gestionar un club. Lo difícil está aquí, que tienes que buscar recursos y si logras el objetivo la felicidad y la satisfacción es doble. Y ojalá lo consigamos.
—Empiezan la Liga el 29 de agosto, la terminarán el 29 de mayo. ¿De qué le gustaría hablar a Muñiz Fernández dentro de nueve meses en esa semana previa al final del campeonato?
—Primero, de estar en esta categoría, haber competido y dejado buen sabor de boca. Que por los campos que pasemos digan: "Vaya equipo que tenéis, vaya plantilla que habéis hecho". Los equipos cuando vienen a El Prado ven el esfuerzo que estamos haciendo para mejorar el estadio, que la gente se quede en la retina que estamos acometiendo un cambio para mejor. Me quedaría con eso. Haber competido de tú a tú con grandes monstruos y mantener este bloque para intentar en años sucesivos el reto de llegar al fútbol profesional.