Partido con muchas caras nuevas
El Glorioso confirmó ayer los fichajes de Miazga y Sylla, y los baleares llevan ocho desde que regresaron a Primera. Será un día muy especial para el exalbiazul Battaglia.
Segunda jornada de LaLiga y segundo partido consecutivo en Mendizorroza. Tras perder por 1-4, contra el Real Madrid, el Alavés recibe al Mallorca de Battaglia, un viejo conocido. El perder contra los blancos entraba dentro de las previsiones incluso de los más optimistas, pero los bermellones son ya un rival directo (sigue el partido en directo en As.com). El conjunto balear, de vuelta al reino de los grandes en España, redebutó en Primera empatando en casa con el Betis.
Los albiazules hicieron en su estreno una gran primera mitad, pero luego se desinflaron en la segunda. Tres picotazos del Real Madrid llevaron al equipo a la UVI, aunque luego Joselu fue capaz de colocar el 1-3 y meter algo de miedo en el cuerpo a los jugadores merengues. En Vitoria, la semana ha tenido varios protagonistas: Ximo Navarro ha vuelto a entrenar, Abdallahi se ha marchado al Istra y Lucas Pérez también es historia. Joselu, por el contrario, apunta a quedarse. Todavía habrá entradas y salidas en el conjunto babazorro. Tras la llegada de Miazga (Chelsea) y Sylla (Girona), interesa Siliki (Chelsea).
Desde el punto de vista deportivo, Calleja podría meter en el once a Ximo Navarro como lateral derecho en detrimento de Martín Aguirregabiria. El tercer capitán tuvo algún error ante el Madrid, como en el gol de Nacho que supuso el 0-2 el pasado fin de semana. El resto del equipo podría ser el mismo. Sorprendió el gran nivel de distribución de Manu García Alonso hace una semana y lo normal es que acompañe en la medular a Pina, más retentivo.
El Deportivo Alavés estuvo interesado en hacerse nuevamente con los servicios de Rodrigo Battaglia porque dejó un sensacional sabor de boca en la pasada temporada, tanto en lo personal como en cuanto a rendimiento deportivo. Llegó cedido por el Sporting de Portugal y contó con la confianza de Pablo Machín, el Pitu Abelardo y Javi Calleja. La operación costaba inicialmente unos cinco millones de euros. También sonó el Panathinaikos, pero fue el Real Mallorca el que se hizo al final con sus servicios.
El cuadro balear quiere estrenar su casillero de visitante, un factor que resultó diferencial la temporada pasada en su arranque en Segunda. Ahora la historia es distinta, en Primera todo cuesta más, pero los bermellones se aferran a sus posibilidades, aunque ya se ha encargado Luis García de desmentir a los que aseguran que este es un partido de rivales de la misma liga.
El madrileño asegura que no es comparable un Alavés asentado con un Mallorca recién ascendido, aunque no descarta medirse de tú a tú ante el equipo vitoriano. Para la cita, Luis García pierde efectivos en defensa con las lesiones de Raíllo, Sastre y Jaume Costa, aunque el nivel de los que están es efectivo, tanto que los laterales Maffeo y Oliván ya fueron titulares hace una semana mientras que Russo, el denominado tercer central, siempre cumple.
Por otra parte, el nivel mostrado por Mboula hace una semana hace pensar que Kubo se mantenga en el banquillo mientras que, en ataque, todo apunta a que repetirá Ángel, mientras que Abdón y el recién llegado Fer Niño, esperarán su oportunidad en el banquillo. Después de un empate en casa, la idea de los mallorquinistas es la de ganar y firmar un buen inicio de campaña, tarea que el Glorioso no le pondrá fácil al equipo balear.