La quinta plaza está en juego

La Real Sociedad depende de sí misma para clasificarse para la Europa League por delante de Betis y Villarreal y únicamente tiene que hacer en El Sadar lo mismo sus rivales, ante Osasuna, que no tiene objetivos. Tras el título de Copa, en la edición aplazada en 2020, acabar quintos, campeones de la otra liga, sería un extraordinario colofón (sigue el partido en directo en As.com).

Osasuna finaliza el curso con uno de los partidos más bonitos del año tradicionalmente. La rivalidad entre navarros y guipuzcoanos solía teñir las gradas de El Sadar de aficionados de ambos equipos mezclados. Este año no será así por culpa de la pandemia, dado que en Navarra aún no hay acceso a la gente en recintos deportivos, y todavía duele más ante el recién reformado estadio rojillo.

Los de Arrasate no se juegan nada, deportivamente hablando, pero si lo hacen económica (3,5 millones según el puesto final) y moralmente. Quieren cerrar bien una temporada que para ellos ha sido más que digna. Con la salvación lograda hace ya dos jornadas, saldrán a darlo todo. Ya cortaron la respiración del Atleti hace una semana.

A Osasuna le toca afrontar este partido con numerosas bajas, sobre todo en ataque, ya que Calleri, Adrián y Chimy Ávila, se han quedado fuera de la convocatoria por molestias físicas. Todo apunta a que, tras apostar por jugar con tres centrales en el Wanda, el técnico de Berriatua se decantará en esta ocasión por un 4-1-4-1, sistema que ha venido empleando últimamente.

Kike García es el segundo fichaje de Osasuna para las dos próximas temporadas, tras Areso, arrebatado al Athletic. El delantero del Eibar tenía también una propuesta del Levante, Celta y Alavés, pero llegó a un entendimiento con Braulio hace semanas. Su llegada puede provocar la salida de Enric Gallego, al que le queda un año de contrato. Kike queda libre por el descenso del Eibar, ante una oferta de un club de superior categoría. Osasuna hizo oficial ayer que no siguen el meta Rubén Martínez y el delantero Adrián.

Los donostiarras pueden ser quintos, sextos o séptimos, en este último caso supondría caer muy abajo, a la Conference League, con menos prestigio y dinero. Si alcanzan la quinta plaza habrán logrado la tercera mejor clasificación del presente siglo y volverán a la fase de grupos de la Liga Europa por segundo año consecutivo, algo que no habían conseguido con el nuevo formato de esa competición.