Tras el Mundial’82, la Selección comenzó su andadura en la Eurocopa con nuevo técnico, Miguel Muñoz, pero la misma imagen. Arrancó con una victoria ante Islandia, después de un partido mediocre, para seguir cubriendo el expediente con un fútbol poco brillante, pero efectivo. Sin embargo, la derrota en Holanda complicó sobremanera el camino de España. Nadie apostaba por los de Muñoz, pero finalmente la Selección se clasificó después de endosarle un histórico 12-1 a Malta. (Foto de apertura: el gol de Santillana no fue suficiente para ganar en Holanda).

Miguel Muñoz dio el susto

Miguel Muñoz sufrió un accidente el 18 de junio de 1983. Su coche chocó frontalmente con un camión y fue internado en la UVI con un politraumatismo con erosiones. Los médicos le pronosticaron entre cuatro y seis meses de baja, pero retornó al trabajo el 3 de septiembre para hacer pública la lista de convocados para un amistoso ante Francia.

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La saga de los Farrugia

Nada menos que cuatro jugadores apellidados Farrugia jugaban en la selección de Malta. Tenía una explicación: eran hermanos y primos, todos de una misma familia. Ellos eran, de izquierda a derecha, Mario y Raymond (primos) y Emmanuel y Edwin (hermanos): dos centrocampistas y dos laterales.

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Victoria poco brillante

La nueva España de Muñoz se presentaba tras el mal Mundial y salió ante Islandia con brío y deseo de hacerse perdonar. Sin embargo, bien por la zaga islandesa, bien porque muchos de los seleccionados jugaban por primera vez juntos, no fueron capaces de marcar antes del descanso. Después, casi la misma historia, con la salvedad del gol de Pedraza. La precipitación, los fallos y el meta islandés impidieron un debut más esperanzador.

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Empate para hacer afición

Nada más comenzar, tres fallos en cadena de España propiciaron el primer gol irlandés y tocó a una Selección que sólo pudo reencontrarse a sí misma gracias a Maceda. El empate espoleó a España que se llegó a poner 1-3, pero el empuje local tuvo su premio e Irlanda acabó igualando. España demostró grandes maneras y arrancó un punto de los que hacen afición.

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Protesta española

El primer partido entre Malta y Holanda se jugó en Aquisgrán (RFA) y fue organizado por los holandeses y no malteses con la consiguiente protesta española.

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Triunfo justo y de penalti

Se mantuvo la línea positiva de la Selección. Sin hacer un gran fútbol y jugando a ráfagas, fue mejor que Holanda y se llevó el partido por la mínima, gol de Señor de penalti. Cierto es que la renta pudo ser mayor si el árbitro hubiera señalado otro penalti, esta vez a Goicoetxea, pero también lo es que tras el gol, España prefirió nadar y guardar la ropa. Lo que importaba era la victoria.

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Gallego dio el liderato

En la vuelta ante Irlanda, los hombres clave decidieron en los momentos clave. Durante muchos minutos, España vivió el fantasma del Mundial, carente de juego e ideas, pero la inclusión de Gallego modificó la imagen: dos cesiones suyas por alto fueron cazadas por Santillana, tras un error de la zaga de Irlanda, y por Rincón. España era líder del grupo.

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Con apuros en Malta

El partido en Malta fue una pesadilla. Los isleños llegaron a tener ventaja (2-1), con dos goles de Busutil, pero Carrasco y Gordillo dieron la victoria.

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Leyenda Arconada

Arconada entró en Islandia en el terreno de lo inolvidable al jugar su partido internacional 50, récord del momento que le arrebató al también vasco Iríbar, con 49 internacionalidades.

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El inicio de una era

El 7 de septiembre de 1983, Holanda asistió al debut con la selección de Van Basten. En esos instantes, nadie reparó en que estaban ante un jugador que iba a marcar una época. Pero pronto dio pie a elucubraciones: al siguiente partido ante Irlanda marcó su primer gol.

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Por primera vez en su historia, Islandia alineó a nueve jugadores profesionales. Fue en el segundo duelo ante Irlanda.

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Gran remontada Oranje

Jugaban Irlanda y Holanda, pero también España ya que si los irlandeses ganaban, los de Muñoz estaban en la Eurocopa (sólo les quedaría vencer a Malta). Irlanda se fue al descanso con 2-0, pero en el segundo acto remontaron el partido con dos goles de Gullit y uno de Van Basten. Fueron 45 minutos negros para España.

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España perdonó y perdió

La Selección volvió a fallar en el día D y a la hora H. Perdió ante Holanda abriéndole las puertas de la clasificación. Pero los de Muñoz no fueron inferiores a la selección naranja, que se encontró con una buena jugada rematada por Houtman y un cañonazo de Gullit. Entre estos dos momentos medió el gol de Santillana y varias ocasiones que los delanteros se encargaron de desaprovechar. España parecía decir adiós a la Eurocopa.

Santillana: el gol

Santillana fue uno de los grandes rematadores de cabeza que dio el fútbol y lo demostró ante Holanda. El Puma, como así se le conocía, ayudó a la Selección española en esta fase con seis tantos, convirtiéndose en el máximo goleador del equipo y del grupo.

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Holanda cumplió

Los holandeses buscaban una goleada para ponérselo difícil a España. Al final, ganaron 5-0 y obligaban a España a ganar por once goles de diferencia.

Tras la goleada llegó la euforia

Holanda se desbocó con el gol de Rijkaard, en el último minuto, que sellaba el 5-0 a Malta. Y no era de extrañar tanto júbilo, pues su seleccionador Rijvers se conformaba con menos en la previa: “Nos basta un 2-0. ¿Acaso creen los españoles que es fácil golear?”. La manita hacía casi imposible el pase de España, pero el fútbol demostró que sus caminos son inescrutables.

Lo tenían hecho, o al menos eso parecía. Tras remontar a Irlanda y ganar a España, rival directo, Holanda daba por hecha su clasificación ya que debían ganar a Malta con tantos goles como dificultades quisieran poner a la Selección de Miguel Muñoz. Golearon a los malteses y ya se veían en Francia. De hecho, tras el duelo ante Malta, el seleccionador ‘oranje’ afirmó: “Nuestra clasificación es merecida”. Lo que no sabía Kees Rijvers es que el fútbol le tenía deparada una no muy grata sorpresa...