Eneko Atxa: "Si ganan, les pongo todo el menú degustación"
El conocido chef vizcaíno, propietario del tres estrellas Azurmendi, es un fiel seguidor rojiblanco. Prefiere ganar la final del Barça para acercarse en el palmarés y por Eurocopa.
Eneko Atxa (44 años, Amorebieta) se define como aficionado del Athletic "a muerte", pero está casado con una realista y "mi mejor amigo y maestro Martín (Berasategui) también es txuri-urdin", así que si el sábado gana el equipo de Imanol no se llevará un tremendo disgusto. Su restaurante Azurmendi es el orgullo de Euskadi, una referencia mundial. El cocinero vizcaíno, uno de los mejores del mundo, vive ansioso los días previos a la final de Copa.
¿Expectante con la final?
Son esos alicientes que tanto necesitamos en estos días difíciles para evadirte de la realidad que está siendo cruda en este tiempo. A los que nos gusta el fútbol y que somos amantes del Athletic, que tengas en 14 días dos finales, es una válvula de escape. Yo tengo claro que la clave está en la primera. Si nos llevamos esa, caen las dos.
El alcalde bilbaíno Aburto dice que la final es como una gran vacuna de moral colectiva.
Sí, como el cine o cualquier cosa que nos entretenga y nos ayude a evadirnos de esta realidad tan compleja. No digo que nos haga olvidar lo que está ocurriendo, porque no somos unos inconscientes. Algo que te apasiona tanto y has esperado durante tanto tiempo igual no lo disfrutas tanto como en circunstancias normales, pero los días previos te emocionas, pones más interés en lo que ocurre en torno al fútbol… yo me acuerdo mucho de vosotros, los que tenéis que informar de los datos negativos que provoca la pandemia.
¿No le rompe el corazón ver San Mamés vacío?
Sí, pero siendo aficionado a tope y teniendo el viaje a San Mamés como una experiencia preciosa, porque no es solo eso sino ir antes tomarte dos vinos con los amigos, el bocadillo… Pero el fútbol ha pasado a un segundo plano. Muchos restaurantes hemos estado cerrados y eso es duro. Le doy prioridad a otras cosas que sí son las que me parten el corazón. San Mamés volverá, y las finales con público. Hay vidas que no volverán, y restaurantes y fábricas.
Si hay que elegir una Copa, ¿mejor la que juegas contra el vecino?
Pero te confieso una cosa. Desde el corazón prefieres ganar la de la Real por no aguantar al vecino. Pero si me pides elegir, la del Barcelona, porque es el más directo rival para ver quién logra más Copas, y nos lleva a Europa. Es una opción más inteligente. Y así, alegría para todos. De todos modos, me resulta difícil renunciar a una, así que triplete o nada.
Martín Berasategui será el que le lance piques si la gana la Real. Le estará alertando de que le van a meter 'garrote' al Athletic.
Yo creo que esta vez estamos los dos con miedo. Espero que ganemos, tengo esa ilusión.
¿Dónde la verá?
Formal, en casa, disfrutando con la familia.
¿Qué menú les pondría antes de la final?
Algo ligerito que les dé fuerzas, pero que les deje descansar bien. Y después de la final, el menú degustación entero y bien armonizado.
¿Cambiaría las tres estrellas Michelin por el triplete?
No, las tres estrellas han dependido de nosotros, los clientes y hacerlo bien, y el triplete depende de la plantilla del Athletic. Lo tienen que hacer bien para que los demás lo disfrutemos. Ahí yo soy el comensal no el cocinero.
Siempre dice que la belleza en una mesa puede estar en un huevo frito y una morcilla. En fútbol la mayor belleza es la victoria.
Pero hay un fútbol bonito y gestos preciosos que hablan mucho y bien del deporte. Cuando sin querer has hecho una falta a un compañero, cuando eres un señor, cuando el público de San Mamés se ha levantado y ha aplaudido a un rival digno y merecedor de la victoria. Eso es belleza, no reside solo en el balón, la jugada, el regate o el remate, también en una manera de ser y actuar.
¿Algún jugador que le guste?
Muchos, les apoyo a todos los que salen, no soy nada criticón, muchas veces hablamos con ligereza, pero hay que ponerse delante de 45.000 y hacerlo todo perfecto. Tiene un mérito de la ostra, son los elegidos, los nuestros, hay que apoyarles y no tengo una debilidad sino muchas. Todos los que saltan al campo sé que lo van a hacer bien.
Marcelino está flacucho, debería pasarse por el Azurmendi.
No tengo ni media pega con quien defiende nuestros colores. Ahora que viene esta final me gusta acordarme mucho de Garitano porque gran parte de culpa de la Supercopa y de este posible segundo título es suya, por lo bien que lo hizo. Esta final era suya, me alegro de lo bueno que nos pueda pasar, pero me gusta acordarme de esa gente que nos ha traído hasta aquí.