Lluís, corazón perico: "Me hace feliz ver cómo está el equipo"

Si hay un jugador de la primera plantilla que ha tenido que picar más piedra para poder asentarse en el Espanyol, ese es Lluís López. El central, que con 17 años llegó a debutar en la pretemporada con Mauricio Pochettino, acumula cuatro jornadas seguidas de titular con cuatro victorias y un gran rendimiento en el centro de la zaga, después de vivir temporadas en las que su participación fue pobre y tuvo que buscarse una cesión, concretamente al Tenerife el pasado enero.

Ahora, Lluís está demostrando solvencia, aunque el canterano, de corazón perico, prefiere ponerse en un segundo plano. "Estoy muy contento por cómo está el equipo. Cuando juegas y participas es un plus. Nos lo pasamos bien, disfrutamos de la situación. Hay que seguir manteniendo estas cosas", comentó el central perico.

Con él en el campo, el Espanyol no ha perdido: "El dato se puede tener en cuenta pero es mérito de todo el equipo. Cada jugador tiene sus momentos y eso se debe aprovechar. El técnico debe estar contento con este rendimiento. El año pasado fue difícil. Ganar cada semana es una felicidad que llevamos dentro y nos hace estar contentos. No tenemos que cansarnos de ganar y hacerlo bien", argumentó en sala de prensa después del entrenamiento posterior a la clasificación copera.

Del paralelismo de Calero a la "mala hostia" de Cabrera

Lluís no participó. Vicente Moreno lo reservó para el domingo, pues apunta a titular junto a David López en el centro de la zaga. Curiosamente, el central ha jugado con los otros tres defensores del equipo. Tres perfiles distintos, tres compañeros de viaje de Lluís. "Calero es parecido a mí, somos más jóvenes y nos gusta sacar el balón. Nos gusta llevar la iniciativa desde atrás. Cabrera tiene experiencia, veteranía y mala hostia, y eso aporta contundencia y fiabilidad. Y eso me ayuda mucho. Y David aporta en todos los sentidos. Tiene personalidad con el balón y luego defensivamente es fiable, con altura y que gana duelos", comentó.

Sobre el partido del domingo, Lluís no quiere otorgarle una etiqueta mayor a la de las jornadas anteriores. "Para nosotros todos los partidos son importantes. Será un encuentro difícil, cada equipo querrá llevar el partido a su terreno. Hay que salir a ganar y ser mejores. "Hay que cuidar los detalles, seguir haciendo las cosas y estaremos donde lo merezcamos", mientras reconoce que los canteranos viven un buen momento y son parte importante del momentáneo éxito: "Sabemos que es difícil llegar, tenemos el sentimiento desde pequeños y queremos aportar la ilusión y las ganas de querer que el Espanyol sea mejor. La Segunda es muy competitiva y hay que seguir en esta línea y no despitarnos".