Bacca sale de fiesta con sus niños

El Villarreal ya es primero en solitario con solvencia, por lo que afronta el futuro con la tranquilidad de poder centrarse en confirmar su remontada en Liga al aparcar hasta 2021 sus preocupaciones en Europa. Venció al Maccabi, el otro gallito del grupo, con más intriga de la esperada porque el partido, con amenaza incluida de aplazamiento, hubo que retrasarlo dos veces por la tromba de agua previa. Sin embargo, hizo los deberes con facilidad y brillo ante un adversario al que se le quedaron las garras en casa. Emery introdujo savia nueva en el once y el descaro de Baena, Kubo y Yeremy fue determinante en el transcurso del encuentro al aportar un gran dinamismo y ambición, justo lo que se necesita en estos jueves desapacibles sin tanto glamur ni afición. Les falta perfeccionar la toma de decisiones y, sobre todo a los atacantes, concretar con más regularidad. Pero les sobra lo más difícil de encontrar, la calidad, el nervio y el hambre. Compartir vestuario con Bacca les está permitiendo hacer un máster.

El colombiano fue el verdadero protagonista del encuentro. Permitió al Submarino vivir siempre con viento a favor. Su gol en el minuto 4, al cabecear un perfecto córner botado por Parejo en su regreso, dio ventaja pronto al Villarreal. El segundo, nada más volver del descanso, confirmó que el camino recorrido era el adecuado. Otra vez se sirvió de la cabeza para culminar, con más maña que saña, un caramelo de Kubo en una de esas diagonales de derecha a izquierda a las que ahora mismo saca más partido que su fundador, el mismísimo Messi. Sobre esa superioridad y la seguridad que siempre da Albiol forjó el Villarreal su dominio. El Maccabi, con cinco atrás, no sabía si jugaba Asenjo o lo hizo Rulli. Insistió más de la cuenta en el pase largo y jamás sacó brillo a sus carrileros, base del 5-3-2 que propuso, ni a sus dos delanteros. En La Cerámica demostró porque aún no ha ganado esta temporada en su liga.

Con el partido cuesta abajo, Emery movió el banquillo a su antojo. Reservó a Parejo, corto de gasolina, dio minutos a Estupiñán, punzante, volvió a confiar en la profesionalidad de Jaume Costa como interior hasta que se lesionó y, más tarde, cuando Bacca le había regalado el tercer tanto a Baena con un magnífico taconazo, le sustituyó para rodar más a Gerard y, sobre todo, para que el cafetero diera paso a Fer Niño, el autor del cuarto gol, y recibiera una ovación cerrada de todos los presentes. Un reconocimiento tan grande y merecido, en su competición fetiche, como el que deberían recibir el que plantó ese bendito césped y los operarios que achicaron agua contrarreloj para convertir, en solo un hora, una piscina en una pista de baile.

Emery: "Los operarios hicieron un trabajo muy bueno con el agua"

El entrenador del Villarreal, Unai Emery, se mostró "muy contento" tras la victoria de su equipo ante el Maccabi Tel Aviv (4-0) en la tercera jornada de la fase de grupos de la Liga Europa y destacó que los tres puntos les encaminan al objetivo: "la primera posición" para allanar su presencia en los dieciseisavos de final.

"Ha sido un día largo y con suspense", dijo Emery por la intensa tormenta que estuvo a punto de aplazar el partido y que finalmente se disputó una hora más tarde de lo previsto. "Son de esas tormentas que casi nunca caen en la Comunidad Valenciana pero cuando son, son de verdad", indicó el técnico vasco en declaraciones a Movistar.

"Los operarios han hecho un trabajo muy bueno, han quitado el agua y también ha dejado de llover", añadió Emery, que reconoció el "gran partido" de sus jugadores. "Lo han hecho muy bien a nivel de compromiso, esfuerzo... se hizo un buen equilibrio entre jóvenes y veteranos para conseguir la victoria y tener el camino despejado. Esta victoria nos encamina al objetivo: la primera posición", añadió.

"Queremos utilizar estos partidos para encontrar mejoras que nos tienen que seguir ayudando en el futuro. Es verdad que dejamos la portería a cero, que ya llevamos 12 goles en Europa y que hoy hemos conseguir mezclar lo mejor de los dos primeros partidos", resumió Emery, que no tuvo reparos en admitirlos.

"Hemos controlado, llegamos con peligro, hicimos cuatro goles y concedimos muy poco al Maccabi. Y para cuando llegaron ellos apareció Rulli con una gran parada. Me alegro también por Bacca porque lo hace en beneficio del equipo. Los jóvenes han tenido buenos minutos", sentenció Emery, que dijo que Jaume Costa "no tiene nada importante" tras retirarse lesionado. -Europa Press