ESPANYOL

La enésima reestructuración de Chen

En los cuatro años y medio que lleva en el Espanyol, ya han pasado seis técnicos, cuatro responsables deportivos y tres en el área corporativa.

Actualizado a
Rodolfo Molina

Al margen de por liquidar la deuda y salvar al Espanyol de una situación financiera crítica, Chen Yansheng será recordado en estos más de cuatro años al frente de la entidad por sus constantes reestructuraciones. La marcha del coordinador de la cantera (Fran Navarro) y del secretario técnico, anteriormente director general deportivo (Óscar Perarnau), son solo dos cromos más en el álbum que ha formado el presidente y propietario desde que aterrizó en la entidad en 2016.

En aquel momento, Constantin Galca era el entrenador, Ángel Gómez asumió la dirección deportiva tras la renuncia voluntaria de Perarnau y Ramon Robert se mantuvo de director general. El técnico rumano abandonó el equipo al final del curso. También el entrenador del filial Lluís Planagumà. Las primeras víctimas de una serie de temporadas de cambios y vaivenes en el proyecto del club.

Temporada 2016-17: el fin de Gómez y el ascenso de Lardín

El primer proyecto de Chen se edificó en la contratación de Quique Sánchez Flores. Cuando apenas se llevaban tres meses de competición, Chen ejecutó el primer cambio. Ángel Gómez dejaba la entidad después de diez meses en el cargo, y Jordi Lardín, coordinador del fútbol base, compaginó ambas funciones.

Los cambios en la dirección deportiva se prolongaron a final de temporada, con la contratación nuevamente de Óscar Perarnau, director general deportivo de la entidad. Junto a él, Fran Navarro se convirtió en el coordinador del fútbol base.

Temporada 2017-18: Robert, Quique y Lardín, despedidos

Las promesas de construir un Espanyol de Champions se evaporaron el segundo año. El Espanyol fue un desbarajuste a la hora de confeccionar los salarios de la plantilla. Eso acabó por dinamitar a Ramon Robert en enero de 2018, lo que provocó la llegada de Roger Guasch, avalado por los consejeros catalanes del club. El deterioro del equipo al finalizar el curso y las declaraciones hirientes de Quique Sánchez Flores provocó su despido y el de Jordi Lardín.

Antes del 30 de junio, Perarnau, ya convertido en la cara visible del área deportiva, decide fichar a Joan Francesc Ferrer, Rubi, y posteriormente a Rufete como director del fútbol profesional.

Rubi y Perarnau, con García Pont.RODOLFO MOLINA

Temporada 2018-19: de la estabilidad a la bomba final

De julio de 2018 a mayo de 2019, el Espanyol de Chen vivió el periodo de más tranquilidad. El equipo funcionó durante toda la temporada, con alguna mala racha que cuestionó al entrenador, pero que finalmente se corrigió el equipo regresó a Europa 12 años después. No hubo cambios hasta que Rubi decidió aceptar la oferta del Betis. Eso provocó un movimiento de piezas. David Gallego dejaba el filial para coger el primer equipo y José Aurelio Gay se hacía cargo del filial.

Temporada 2019-20: el curso de más cambios

Esta temporada que aún no ha finalizado se ha llevado por delante a un director general, ya que Roger Guasch fue despedido y sustituido por Josep Maria Duran, en diciembre; tres entrenadores, pues de Gallego se pasó a Pablo Machín y posteriormente a Abelardo Fernández; Rufete adelantó a Perarnau en la dirección deportiva y ahora se ha procedido al adiós del ex técnico de la casa, mientras que el fútbol base, que había disfrutado de tres años de estabilidad, vuelve a cambiar de manos.

En total, en cuatro años, han pasado seis entrenadores, tres directos generales, cuatro responsables deportivos, dos coordinadores de la cantera y tres entrenadores por el filial. Una herencia en una época inestable.

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