El Nottingham: de Segunda a campeón de Europa en dos años
Un serial que repasa a las grandes sorpresas de la historia del fútbol, desde el Nottingham dos veces campeón de Europa al Leicester que conquistó la Premier en 2016.
En el fútbol, la Cenicienta tiene nombre: el Nottingham Forest. Y también el Hada Madrina: Brian Clough. Este legendario técnico inglés llegó al modesto club de East Midlands en enero de 1975, cuando militaba en la Segunda División inglesa, después de que tres temporadas antes hubiera llevado al Derby County a conquistar la liga. Aquello fue una decisión que en su día se consideró muy sorprendente. En su tercera temporada al frente del Forest (1976-77), lo ascendió a Primera, y entonces fue cuando se obró el milagro. La calabaza se convirtió en una carroza, los harapos, en un vestido de gala, y la humilde criada, en una princesa de cuento.
Y es que en los finales de los 70 el Liverpool se había proclamado como el nuevo rey de Europa. El club red vivía la que hasta día de hoy sigue sigue siendo su época de mayor gloria, conquistando en aquellos años cinco ligas y dos Copas de Europa de manera consecutiva en 1977 y 1978 (lograría dos más en los seis años siguientes). Pero el Nottingham se coló en su fiesta e hizo que todas las miradas se giraran hacia él.
En su primera temporada en Primera, Clough, con un equipo de veteranos, jóvenes promesas y jugadores descartados por otros equipos, ganó la Liga. Y con solvencia, a siete puntos del entonces poderosísimo Liverpool. Es más, estuvo 42 partidos imbatido en liga, un récord que estuvo vigente hasta 2004, cuando lo batió el Arsenal de 'Los Invencibles' de Arsene Wenger. Además, aquella misma temporada ganaron la Copa de la Liga. Un doblete histórico para un recién ascendido. Las comparaciones con el Leicester que ganó la Premier en 2016 son inevitables. Pero al contrario que los foxes, el Nottingham no se diluyó, sino todo lo contrario: agrandó una leyenda de tal manera que difícilmente, por no decir imposible, se pueda volver a repetir.
Su andadura por Europa la temporada siguiente no pudo comenzar de mejor manera. El Liverpool, campeón de las dos ediciones anteriores, fue su primer rival. Como en los torneos locales, el Forest salió victorioso y aquello le sirvió de impulso anímico para ir pasando fases. AEK, Grasshopper y Colonia fueron cayendo y el Malmö esperaba en la final.
La final de aquella Copa de Europa de 1978, que obviamente ganó el Nottingham (1-0) puede ser la menos prestigiosa de todas las que se han disputado. Es así hasta tal punto que si el Malmö hubiera ganado aquel título, sería el club sueco el protagonista de este capítulo del serial Campeones por Sorpresa. Pero para ganar finales hay que jugarlas y, para ello, hay que llegar. Y el Nottingham lo hizo. En dos años el club de la ciudad de Robin Hood había pasado de pelear por el ascenso a Primera a ganar el título más importante del continente.
Lo lógico sería pensar que después de aquello, el reloj tocaría las doce y el cuento se acabaría. Pero Clough tenía un último truco. El triunfo en la Copa de Europa dio acceso al Forest a disputar la Supercopa de Europa, en la que ganaron al Barcelona (2-1), y el pase automático a la Copa de Europa del año siguiente como campeón vigente. Y el Forest hizo lo que parecía imposible: logró revalidar el título, esta vez en el Santiago Bernabéu y frente al Hamburgo, que en sus filas tenía a Kevin Keegan, dos veces galardonado con el Balón de Oro.
Con aquel doblete europeo consecutivo, el Nottingham pasó a la historia como el primer equipo que tenía más Copas de Europa que ligas de su país y entró en el selecto club de equipos que tienen más de una Orejona, que ahora dispone de once miembros: Madrid (13), Milán (7), Liverpool (6), Barça y Bayern (5) Ajax (4), Inter (3) y Juventus, Benfica y Oporto (2), además del Forest.
Clough se mantuvo al frente del Nottingham 18 temporadas, en las que el club ganó además otras dos Copas de la Liga. En la temporada 92-93, la venta de Sheringham, la estrella del equipo, y sus problemas con el alcohol, llevaron al equipo a un declive del que nunca salió. El Forest descendió y Clough dejó el club al final de la temporada. A día de hoy, el Nottingham es el único campeón de Europa, sin contar al desaparecido Steaua, que no juega en la Primera División de su país, es más, llegó a estar a principios de siglo en Tercera. Y es que tras la gran fiesta, Cenicienta nunca más volvió a encontrar su zapato.